Kirchner (como Tyson) tiene un gran poder de daño.
Después de Blejer y De Pablo, el Coloquio Industrial de la UIC convocó a Sergio Berensztein. Además de abogar por un cambio del modelo de estado y atenuar el hiperpresidencialismo argentino, el titular de Poliarquía usó una figura poderosa: “Hasta el 2008, Kirchner era como Mike Tyson, les ganaba a todos en el primer round. Pero cuando vino la decadencia ya vimos cómo terminó Tyson: mordiéndole la oreja a Evander Holyfield. Kirchner perdió poder y autoridad, pero conserva una gran capacidad de daño. Y es muy difícil para Mike Tyson dejar de ser Myke Tyson. Ojo con la decadencia de los pesos pesados...”.
Para Berensztein, en el corto plazo -y deberíamos escapar un poco del corto plazo- agosto será un mes clave: el Congreso debe renovar o no las facultades delegadas y en septiembre está la discusión del presupuesto. Veremos qué hace Tyson si siente que pierde la pelea...