Renault fue pionera con su Kangoo E y Nissan se ufana de tener en el país el Leaf, el eléctrico más vendido del mundo. Además están los city car que quieren lo suyo como el Volt made in Córdoba, el Tito made in San Luis y el Zero Electric fabricado en Castelar, provincia de Buenos Aires.
Todo eso y más anda dando vuelta por el incipiente mercado de autos electrificados pero apenas significa el 10% de las ventas, porque el 90% restante pertenecen a vehículos Toyota que apuesta a múltiples formatos:
Híbridos: como el Prius y el Corolla (este último hecho en Brasil) que proponen dos motores, uno a combustión tradicional y otro eléctrico que se retroalimenta de la fricción y el movimiento del propio auto para recargar su batería y movilizar el motor eléctrico. Resultado: ahorro de 50% del combustible fósil.
Híbridos enchufables: quizás lo mejor de los dos mundos, pero también los más caros. Además de las ventajas del híbrido (poder ir “a nafta” de Córdoba a Buenos Aires, por ejemplo), las baterías que se cargan a electricidad permiten autonomía urbana sin gastar combustibles fósiles.
100% eléctricos: aunque Toyota siempre defendió sus híbridos, finalmente parece apostar fuertemente a los autos totalmente electrificados, acompañando a una industria que en ese sendero ve el futuro de la movilidad urbana.
Auto a hidrógeno: el “bicho raro” del line up que Toyota trajo a Córdoba para la Cumbre de Economía Circular fue un Mirai FCEV, un vehículo eléctrico con celdas de combustible que funcionan a hidrógeno, un gas muy abundante en la naturaleza pero cuya compresión a los niveles necesarios para el almacenamiento no es fácil. De hecho, este modelo (que es un vehículo comercial en Japón) debe cargarse con algunos artilugios en Argentina donde no hay “surtidores” de hidrógeno para autos.
¿Es el hidrógeno el combustible para la movilidad del futuro?
Quizás sí para la movilidad colectiva y de cargas (autobuses y camiones) porque este insumo permite autonomías que rondan los 1.000 km con procesos de carga muy veloces (menos de 5 minutos). Para la movilidad personal y familiar, pareciera que la decantación será por vehículos 100% eléctricos y formatos híbridos, según los distintos mercados del mundo, razonan desde Toyota.
De las 400.000 unidades 0 Km que se venden en Argentina, apenas unas 6.000 son electrificadas; por los precios ofrecidos será largo el camino del crecimiento de estos formatos y -en paralelo- de la infraestructura de carga fuera del hogar, una de las piezas fundamentales para su masificación.