Los apoderados de la liga Sumar volvieron a los Tribunales Federales con un reclamo contra decisiones de la Junta Electoral partidaria, a la cual Bustos Fierro ya le tiró de las orejas el viernes pasado ordenándole dejar participar de los comicios internos a los opositores a la coalición Convergencia.
Los sumandos acusan a la Junta Electoral, cuya mayoría que toma decisiones responde a Convergencia, de incorporar tres departamentos para el oficialismo haciendo una interpretación del fallo de Bustos Fierro, y pese a que la resolución del magistrado apuntaba solamente a la situación de Sumar, entre otras presuntas irregularidades. Asimismo, acusan la insólita habilitación de nuevas listas de los núcleos que conforman Convergencia en algunos de los departamentos donde esta alianza se presenta.
Además, piden la incorporación de 50 boletas por urna, para que al ser distribuidas lleguen con el material mínimo a cada rincón de la provincia, “a los fines de asegurar el inicio del comicio y votos de todas las listas en todo el territorio provincial en aras de la efectiva participación del afiliado”.
También, desde Sumar reclaman que se informe a las listas que participan de las elecciones los nombres, DNI y teléfono de los presidentes de mesa designados y de los responsables de la distribución de las urnas en cada uno de los departamentos, “en aras de la transparencia electoral”.
Carasso
Mientras tanto, los principales candidatos a presidente del Comité Central, Marcos Carasso y Rodrigo de Loredo, cerraron ayer sus campañas para la elección del domingo.
Carasso trabajó el interior, descansando en que en la ciudad de Córdoba el aparato de Confluencia que apoya al mestrismo le dará un envión suficiente a su tramo de la boleta de la alianza Convergencia.
En el último día de campaña, el negrista recorrió San Francisco y Las Varillas, en el departamento San Justo. “El lunes voy a convocar a todos los radicales porque necesitamos estar unidos”, prometió.
“El lunes lo primero que voy a hacer es convocar a todo los radicales para que juntos, construyamos un radicalismo fuerte que significará un Juntos por el Cambio fuerte, para a partir de allí empezar a armar un proyecto que enamore a los cordobeses con una alternativa seria y responsable, e impedir así que el kirchnerismo sea gobierno en Córdoba”, sostuvo Carasso.
“Necesitamos que todos los radicales estemos unidos", pidió, finalmente.
De Loredo
De Loredo realizó encuentros presenciales y virtuales con dirigentes y militantes radicales.
“Se viene un domingo histórico para los radicales y para los cordobeses: empieza el camino del radicalismo ganador, protagonista, ese radicalismo grande y de todos, con ambiciones reales y que volverá a gobernar la provincia”, aceleró.
De Loredo expresó que “la necesidad de un cambio se siente en cada rincón de la provincia”. “Lo hemos comprobado –agregó- con todo el equipo a lo largo y a lo ancho: necesitamos un radicalismo fuerte para ponerle un freno al kirchnerismo salvaje que parece venir por todo”.
El candidato de Sumar recordó que “atravesamos un proceso difícil, con muchas trabas impuestas por el oficialismo para evitar la elección”.
“El oficialismo quería esconder las llaves y negarles a los afiliados la posibilidad de participar y elegir. Sin embargo, con el apoyo de todos y el trabajo prolijo que se hizo desde Sumar, pudimos revertir la situación”, señaló.
“Tenemos las ganas, la fuerza y el compromiso de representar a la UCR en los tiempos que vienen, convencidos de la necesidad de construir un partido de mayorías, moderno y abierto que le vuelva a hablar a la gente y deje de hablarse a sí mismo”, remarcó.
Por último, De Loredo reconoció que “estamos convencidos que si cambia la UCR le podremos empezar a poner un límite al kirchnerismo y a los más de veinte años de hegemonía peronista en la provincia. El domingo vamos a ganar. Se viene un viento de cambio, y no lo van a poder parar”.