Septiembre ha mostrado la aceleración marcada del plan de campaña que mueve a Martín Llaryora -aun sin confirmar, el eventual candidato a gobernador que presentará Hacemos por Córdoba- por el interior provincial. En el caso del departamento Río Cuarto, las visitas se hacen cada vez más frecuentes, siendo el último antecedente el que se dio entre el viernes y sábado, una especie de “vuelta al sur en dos días” que lo reunió con intendentes y militantes de la región.
La agenda del intendente de Córdoba durante esta gira por uno de los departamentos clave para el proyecto del 2023 incluyó paso por localidades de gestión peronista/schiarettista, pero también sumó presencia con intendentes de Juntos por el Cambio. El nuevo paso tuvo como objetivo sumarle cuerpo al denominado “Modelo Córdoba” que Llaryora intenta componer como propio en la continuidad del actual programa de gestión provincial, logro que pretende conseguir coleccionando intendentes de un interior donde todavía debe crecer.
Aunque el itinerario del fin de semana incluyó un obvio paso por la capital alterna provincial en la que Gobierna su par, ex compañero de estudio y rumoreado vice de la fórmula que encabezaría el año que viene, esta recorrida regional tuvo paradas en Adelia María, Vicuña Mackena, Sampacho y Coronel Moldes. De hecho, el viaje comenzó en las localidades más pequeñas para finalizar en Río Cuarto, donde lo esperaban empresarios del sector industrial.
Visita anti-grieta
Para desglosar la excursión cronológicamente, es necesario comenzar con la reunión que Llaryora mantuvo con su par de Vicuña Mackenna, Roberto Casari, el único intendente cambiemista que lo recibió durante la gira. Los intendentes firmaron un convenio por medio de la cual esa localidad del departamento Río Cuarto se adhería a la Red Iberoamericana de Gobiernos y Ciudades Circulares, una de las marcas del modelo llaryorista.
“Este es un pequeño ejemplo de cómo dos intendentes de distintos partidos pueden reunirse, conversar y proyectar políticas en común que beneficien a los vecinos de sus ciudades”, declaro Llaryora tras reunirse con el intendente radical. Fotos como la de Mackenna se muestran como una parte fundamental del plan de HpC, concentrando su discurso con la postura “anti-grieta” que también definen al “Modelo Córdoba”.
Al mismo tiempo, esta agenda termina pinchando a sus rivales con el supuesto apoyo que intendentes como Casari podrían darle a su candidatura. Encuentros como este crispan los nervios de la UCR, partido dominante en esta parte del territorio cordobés, cuando Luis Juez y Rodrigo de Loredo todavía no arrancaron a pisar fuerte en el sur.
Con López, junto a intendentes
Aquel viernes también llevó al intendente cordobés por Adelia María, lugar en el que se reunió con Jorge Marino, el primer jefe municipal del schiarettismo en formar parte de la gira. Allí tuvo lugar el cierre de la primera jornada de la excursión al departamento, con una cena en la que Llaryora pudo juntarse además con dirigentes y militantes de la región aledaña a esa localidad. También hubo lugar para intendentes de la región, entre los cuales destacó un conocido del Gran Río Cuarto: Miguel “Minino” Negro, jefe municipal de Santa Catalina desde hace 40 años.
Dicho encuentro estuvo marcado por la presencia del flamante ministro de Gobierno y Seguridad de la provincia, Julián López, quien asomó como una referencia del plan de inserción regional de Llaryora. López fue intendente de Melo, localidad del extremo sur cordobés, hasta que ingresó al Panal de la mano de José Manuel de la Sota. Como referente del departamento Roque Sáenz Peña, el ministro se muestra como una vía de ingreso a los intendentes del sur, rol que le quedaría a mano tras reemplazar a Facundo Torres en Gobierno. Es muy probable que la figura de López aparezca cada vez más seguida por esta región junto al proyectado Llaryora.
La agenda del intendente capitalino continuó movida en la jornada del sábado, cuando comenzó en Coronel Moldes junto a la intendenta Eva “Beby” Rosso para incluirla también en la red de Gobiernos y Ciudades Circulares. Sampacho tampoco se quedó fuera de ese convenio luego que Llaryora se reuniera con el intendente Franco Suárez, con quien recorrió la localidad con el diputado Carlos Gutiérrez y Roberto Koch, quien comienza a enfilarse como principal armador departamental del schiarettismo. Allí también estuvieron Ricardo Reynoso (intendente de Chaján y presidente de la Comunidad Regional) y Flavia Bonelli (intendenta de Suco).
Cierre en Río Cuarto
Todo indicaba que Llaryora dejó lo mejor (o más importante) para el último, concretando su segunda visita a Río Cuarto en lo que va de septiembre (la primera había sido durante la Expo Rural). El intendente cordobés llevó adelante una cargada agenda de reuniones en la capital alterna y hasta se permitió cerrar la jornada con otra gran cena, celebrando el aniversario nº110 de la Asociación Atlética Estudiantes de Río Cuarto, el club más popular de la ciudad y que actualmente milita en la segunda división nacional.
Entre su llegada y la cena ocurrió lo importante de un nuevo -y cada vez más frecuente-paso por la segunda ciudad más populosa de Córdoba. Junto al intendente Llamosas, se reunió con productores y empresarios locales para dialogar sobre las necesidades y potencialidades del sector, utilizando una vez más como sede a la Sociedad Rural de Río Cuarto. Más adelante, se encontró con las autoridades del Parque Industrial Arturo Frondizi, uno de los espacios que componen la espina dorsal del “Modelo Córdoba”.
“Queremos, con el mismo compromiso de siempre, acompañar a la industria, a la producción y al desarrollo de más parques industriales. Apoyar a la industria es un tema esencial para generar trabajo, y es el camino que tenemos para hacer progresar al país”, dijo Llaryora con traje de candidato en la ciudad que le ofrecerá a su proyecto el segundo caudal de votos más importante de la provincia.
A su lado permaneció siempre el intendente riocuartense, quien no despegó la marca a la espera de un guiño que le permita acercarse al objetivo de completar la fórmula por la gobernación. Una vez más, el “Lla-Lla” se mostró rodeado de empresarios y dirigentes, actores que se encargan de correr la bola sobre esa “sociedad ideal” entre ambos intendentes.