El presidente Mauricio Macri eligió Córdoba como destino de descanso para el fin de semana largo. Quienes cronican sus giras por la provincia advirtieron rápidamente que, esta vez, el fundador de Cambiemos eligió romper el patrón. Sus actividades recreativas no fueron estrictamente privadas. Otrora había sido Eduardo “Gato” Romero el único invitado a las tardes de juego del presidente, mientras la dirigencia de la alianza quedaba totalmente ajena a esos convites.
Macri y su esposa eligieron la ciudad gobernada por Daniel Salibi, Mendiolaza, para cumplir con un cronograma de descanso y reuniones políticas encubiertas. El radical estuvo presente en varias actividades del mandatario nacional que dejó inaugurada su próxima campaña: el de líder de la oposición.
Macri buscó mostrarse accesible con la gente y con los referentes de su espacio. Además de su habitual compañero de golf e intendente de Villa Allende, también compartió algunos momentos con el mandatario y su esposa, Juliana Awada, el marcosjuarense, Pedro Dellarossa. El empresario y titular de la Bolsa de Comercio de Córdoba, Manuel Tagle, fue otro de los protagonistas del “finde” del presidente.
Todos ellos se esmeraron en remarcar la energía de Macri para la etapa que sigue. Ratificaron, como era de esperarse, que el primer presidente no peronista que terminará su mandato tendrá un rol activo e importante desde la oposición.
El mensaje de sus voceros encaja perfectamente con el perfil de la gira por Sierras Chicas. Macri necesita que la dirigencia crea que sólo él reúne las condiciones para marcarle los puntos al futuro gobierno de Alberto Fernández. Cierto es que el 40% de los votos que cosechó en octubre son más que suficientes para reclamar ese lugar, pero el pedido de “democratización” interna que hacen no sólo los socios de Cambiemos sino también desde dentro del PRO exigirá esfuerzos y voluntad de consensos.
Ahora bien, algunos mensajes que habría dado el presidente a los dirigentes con los que se entrevistó no hizo más que agitar la interna amarilla. El intendente de Villa Allende estaba exultante.
Macri habría pedido a Romero que cumpla un rol activo en la reorganización del partido en Córdoba. Incluso, le prometió un rol clave en el 2023 ya sea para la elección provincial o para el próximo recambio legislativo nacional. El trascendido generó todo tipo de especulaciones en el partido.
Nadie duda que el ex golfista integre el círculo íntimo del fundador del PRO. En concreto, el deportista internacional incursionó en la política por convite del entonces candidato a la máxima jefatura del Estado. Pero lo cierto es que la colección de fotos que obtuvieron algunos dirigentes macristas calentaron las discusiones sobre las alternativas para reordenar el espacio.
Cabe recordar que en el PRO Córdoba convive un sector que hoy se encuentra alineado con Emilio Monzó y Rogelio Frigerio y otro afín a Marcos Peña. Los “salvadores” partidarios carecerían de legitimidad –independientemente del sector que surja- porque sólo el ordenamiento de la interna nacional del macrismo dará algunas pautas al resto de las filiales provinciales.
De hecho, el viernes que viene, a las 16 en la residencia de Olivos, todos los presidentes de distrito y la Mesa Ejecutiva del Consejo Directivo PRO mantendrán un encuentro con Macri para atender a la nueva renovación de autoridades. Seguro, el cordobés Darío Capitani volverá con precisiones de la terna en la que competirían el propio Macri, el peñista Francisco Quintana y la actual ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich.
Los cordobeses ya anticiparon su posición: apoyan a Macri como conductor pero bajo ningún punto estarán nuevamente bajo las órdenes directas del jefe de Gabinete. Entre quienes siguen con atención la jugada de Frigerio y Monzó se encuentran el citado Capitani, y los diputados Javier Pretto y Gabriel Frizza.
Pero si se impone el “peñismo” se valorizan las chances de alzarse con el control del PRO local otros dirigentes que hicieron buenas migas como Héctor Baldassi, Soher El Sukaria y Laura Rodríguez Machado. Al medio, se encuentran referentes de perfil de gestión como Romero o Dellarossa.
Macri buscó contentar a sus interlocutores de fin de semana pero la ausencia de un plan maestro a nivel nacional aumenta la incertidumbre que ya se venía observando en algunas canteras, en especial, en la legislativa. Por caso, el macrismo cordobés en el Congreso se mantendrá dentro del interbloque Cambiemos, pese a las diferencias; pero en la Legislatura, el PRO promete bloque propio y en el Concejo continúa el juego de intrigas y no resolvió cómo jugará.
Convocatoria
El presidente Macri convocó a una marcha en la Plaza de Mayo para el sábado 7 de diciembre, tres días antes de la asunción del mandatario electo Alberto Fernández, con un video que difundió en redes sociales de Internet.
“7 de diciembre, 17hs., Plaza de Mayo #7D”, indicó el posteo que realizó esta tarde el primer mandatario en su cuenta de la red social Twitter.
El texto fue acompañado con un video que muestra imágenes de la marcha al Obelisco y a Plaza de Mayo del 24 de agosto en apoyo a Macri, y de las otras 30 denominadas “Sí, se puede”, con las que el primer mandatario hizo campaña en busca de su reelección.
La convocatoria fue realizada cuando el presidente con su familia permanecía en Villa Allende, Córdoba, donde llegó el viernes para descansar durante el fin de semana largo. Al cierre de su estadía, agradeció la hospitalidad de los cordobeses por la misma vía.