Antes de la medianoche del lunes próximo, la dirigencia del PRO Córdoba debía anotar la nueva nómina de autoridades surgida del diálogo, o bien, las opciones que se someterían al voto directo de los afiliados. Todo parecía indicar que ya no había margen para una nueva postergación porque las autoridades nacionales del partido habían pedido expresamente su dedicación al armado territorial, a tiempo completo, desde marzo.
Lo cierto es que el plazo se extendió siete días más y, con él, el resto del cronograma electoral. Por lo tanto, antes del brindis por la Navidad, el 21 de diciembre, los competidores deberían tener el organigrama partidario cerrado. Esto es lo que desean la titular de la fuerza, la macrista paladar negro, Patricia Bullrich, también otro líder emergente como Horacio Rodríguez Larreta.
La postergación tiene una explicación operativa, pero que sirvió de excusa para contener los pataleos en Buenos Aires de una de las internistas, Soher el Sukaria. Afirman desde el partido que la Justicia “olvidó” procesar 500 fichas de afiliación. Por lo tanto, el padrón corregido estaría disponible en breve.
Los alfiles de Bullrich presionaron al oficialismo local –atornillado a la idea de la interna por la presunta ventaja medida en fichas de afiliaciones- para prorrogar la presentación de listas y mover la fecha de la interna del 7 al 21 de febrero, primera fecha disponible después de la feria judicial. Aceptaron a regañadientes.
El Sukaria y su grupo tendrán más tiempo. La diputada amarilla, actual titular del PRO Capital, ¿asoma como la nueva protegida de Bullrich? A las claras, podría decirse que la conducción nacional intercedió para mejorar las chances de la línea que encabeza en la negociación con los monzo-larretistas, grupo del que alguna vez ella también formó parte.
Desde el sector que tiene a Nicolás Massot como nexo con el ala peronista del macrismo, niegan una preferencia por El Sukaria como sí se había expresado en la última negociación por las listas de diputados nacionales. Tampoco desconocen el fino hilo que los une a los popes amarillos referenciados con el expresidente Mauricio Macri.
“Nuestros sector ya hizo una propuesta a la que no respondieron. Desde Buenos Aires habían prometido mediar y empujar a la diputada y su grupo a cerrar un acuerdo. Ahora ya no hay más tiempo”, presionó una fuente del oficialismo amarillo. La oferta tiene un extremo innegociable: la presidencia del PRO provincial, aunque también planifica avances en el coto de poder de El Sukaria, la Capital. ¿Qué quieren la línea retadora? Lo mismo.
“Del otro lado plantearon presidir Provincia y Capital, así que no tomamos la contraofertacon seriedad. Insistimos con que si no presidimos el partido, tendremos que ir a las urnas. Revisamos a fondo el padrón electoral y creemos que ganamos cómodos la ciudad y el interior, así que estamos envalentonados a no permitir mucho más caprichito de acá o de allá”, cerró la misma fuente consultada.
La declaración muestra una clara voluntad de tensionar con Bullrich, aunque prefieren presentar la advertencia con un poco de edulcorante:“Patricia (Bullrich) y Horacio (Rodríguez Larreta) nos prometieron un proceso sin vetos y respetar las fichas. Vamos a exigir que cumplan ese compromiso”.
Jóvenes en escena
La Juventud del PRO, liderada por Gonzalo Torres, intentó diferenciarse de los tironeos de la liga mayor. Eligieron mostrarse proactivos con la organización de un panel con las primeras figuras de Juntos por el Cambio para debatir la agenda que se viene. Ayer disertaron de forma virtual los exministros de Macri, Gustavo Santos, Alejadro Finocchiaro, Jorge Faurie y Hernán Lombardi, también la presidenta del partido, Bullrich. En tanto, el expresidente envió un video.
También quieren formar parte de la Junta Ejecutiva y durante la semana mantuvieron reuniones con los internistas para ser considerados en el reparto.