Mientras el kirchnerismo intenta eludir las repercusiones del despido del ministro de Producción Matías Kulfas -asociado a que el ex funcionario lanzó sospechas de corrupción sobre la licitación del Gasoducto Néstor Kirchner- los radicales armaron una batahola en torno a la figura de Hipólito Yrigoyen por la opinión histórica de Mauricio Macri sobre el primer presidente de la UCR, y con ello pusieron en crisis a la alianza con el PRO. La polémica se inició el domingo y ayer se incorporó el Comité Central del radicalismo cordobés.
Macri señaló a Yrigoyen como el primer populista en un discurso que dio en Brasil y el presidente de la UCR, Gerardo Morales, pareció sentir la necesidad de aguantar los trapos partidarios, a riesgo de quebrar la coalición.
“El populismo se originó en Latinoamérica, y tal vez en Argentina es donde arrancó, primero con Yrigoyen y después con Perón y Evita”, fue la frase que pronunció Macri en una conferencia. Morales le salió al cruce defendiendo a su prócer elevando el tono con una advertencia que es más propia que ajena: “Si tu intención es romper Juntos por el Cambio para buscar un acuerdo con sectores de la extrema derecha antidemocrática, lo mejor es decirlo concretamente”.
El mismo domingo, Mario Negri, quien suscribe cada palabra de Morales, recordó un homenaje que Macri, cuando era presidente, dedicó a Yrigoyen. Otros dirigentes relevantes de la UCR local, como Rodrigo de Loredo y Ramón Mestre, no se sumaron públicamente a la polémica hasta ahora.
La posición que tomó Negri, era previsible, fue repetida por el presidente del Comité Central de Córdoba, Marcos Carasso, quien también se alinea en el grupo Morena. En su nombre, y con el sello del Comité, apoyó la reivindicación yrigoyenista. Aunque, mejor que Morales, tratando de no causar un problema en la alianza cordobesa.
El breve comunicado del Comité Central señala: “Reivindicamos a Hipólito Yrigoyen como un presidente republicano, democrático y con valores que muchos tendrían que tomar de ejemplo. En su presidencia se lograron muchos derechos laborales y la educación fue prioridad”.
Luego, el negrista Carasso recordó que “Hipólito Yrigoyen fue el primer presidente electo con la ley Sáenz Peña, creador de YPF, el de la revolución educativa y la jornada laboral de ocho horas”. “Un estadista que, en tiempos difíciles, supo hacer protagonista a nuestro país en el escenario mundial”, lo calificó.
Para el presidente del Comité y diputado nacional, “muy lejos queda la definición de populista para este líder”.
“Es fundamental el respeto mutuo entre los partidos que formamos parte de Juntos por el Cambio”, concluyó.
En tanto, el titular de la Línea Córdoba, Javier Fabre, tomó un camino distinto, al considerar que algunos radicales “quieren sobreactuar la ofensa por las declaraciones de Macri”, ignorando otras críticas que históricamente recibió la UCR de parte de Luis Juez. Y advirtió: “Si vamos a condicionar esta alianza por las declaraciones sobre nuestros próceres o diferencias ideológicas, les cuento que en Córdoba a Juntos por el Cambio lo ha cooptado un peronista vergonzante y lo más rancio del orden conservador, todos profunda y furiosamente antiradicales”.
El Comité Central realizará hoy una reunión en la Casa Radical para analizar el progreso del reglamento de Juntos por el Cambio. Se verá si la polémica yrigoyenista continúa.
Macri
El ex presidente Macri lamentó ayer la polémica originada en sus palabras, pero protestó por la “desmesurada” reacción de Morales.
"Lamento especialmente lo inoportuna que resulta frente a la angustia y el hartazgo de los argentinos, que hoy nos reclaman unidad y claridad en nuestras ideas sobre cómo vamos a sacar el país adelante", dijo Macri.
Además, aseguró que "siempre" valoró "las ideas del radicalismo en sus distintos matices".
"Lamento la carta que he recibido (a todas luces desmesurada) que descontextualiza un apunte histórico que hice en una conferencia en Brasil", afirmó.