La nueva planta cuenta de 70 metros lineales y permitirá sustituir -casi en su totalidad- el uso de materia prima importada y cuadruplicar la actual capacidad instalada de la empresa. Se ubicará en el polo fabril de más de 20.000 m2 cubiertos que la compañía posee en el Parque Industrial de San Francisco, en una nueva nave de 1.600 m2, generando 63 nuevos empleos, entre directos e indirectos. El 70% del total producido en esta inversión se destinará al mercado externo.
“Esta nueva planta de producción nos permitirá generar un salto de calidad a estándares mundiales, con mayor volumen de producción, con una más eficiente ecuación de costos y una importante mitigación de huella de carbono, ya que se reducen significativamente las emisiones de CO2, lo que se complementa con un esquema de economía circular, puesto que la planta puede usar desechos de otras industrias”, resumió Daniel Parodi, al timón de Karikal.
La línea productiva, de origen chino, ya está en pleno proceso de montaje y estará operativa a mediados de octubre.