Martín Castro, cordobés, ex rugbier y corredor de ultra maratones, ya se encuentra a más de 5.000 metros de altura, intentando ascender a la cima de la montaña más alta de América.
Castro inició esta aventura personal y solidaria para plantar una bandera de la lucha contra la desnutrición y el hambre en Córdoba, trabajo que lleva adelante la Fundación Banco de Alimentos.
En esta admirable hazaña, son muchas las grandes, pequeñas y medianas empresas que se sumaron a la campaña “montaña de alimentos”, que busca recaudar alimentos para beneficiar a los cordobeses más necesitados.
La finalidad es llegar a hacer cumbre junto a Martín, recibiendo donaciones a medida que vaya ascendiendo. Las personas y/o empresas pueden donar alimentos por tramos y altura, y construir así una montaña propia de alimentos para combatir el hambre en la ciudad. Por cada kilo que se reciba, la cima estará un metro más cerca.
La campaña está en marcha y cosechando sus frutos, con una muy buena recepción entre las empresas cordobesas. Con una fuerte apuesta se sumaron Briskbox Crossfit y Richetta y Cía. Además, apadrinan diferentes tramos con donaciones Praga Alimentos, Pritty SA, la Bolsa de Cereales de Cba, Inka Expediciones, TC Tech, Georgalos, Denso, Molinos Sytari, Intel, Movistar, Orieta y la Clínica de Ojos Córdoba.
La montaña ya recaudó 4.102 kilos de alimentos que llegarán a 20 mil cordobeses necesitados, a través de la Fundación Banco de Alimentos. Faltan 402 kilogramos para conquistar el objetivo planteado inicialmente, por ello se espera que más empresas y personas se sumen a la hazaña.
Cómo colaborar
1. La campaña está dividida por tramos y altura, para que cada persona y/o empresa pueda apadrinar la cantidad de metros con los alimentos que desee.
2. Ponerse en contacto con la fundación Banco de Alimentos para informar la donación. Puede ser a través de su inbox en Facebook: Banco de Alimentos Córdoba, escribiendo a donantes@bancodealimentoscba.org.a donantes@bancodealimentoscba.org.ar o llamando al 0351 496 9212.
3. Coordinar la entrega de los alimentos a los centros de recepción.
Así es como un desafío personal se transforma en una gran movida solidaria, gracias al apoyo de personas y empresas locales. Martín Castro reconoce que la tarea de reducir el hambre en Córdoba es más difícil que subir los casi 7 mil metros del Aconcagua. Pero nada es imposible, cuando toda la comunidad brinda su compromiso.