De la mano de Francisco García Moritán y Alejandro Cadioti de grupo Hutong Tang, nace este ambicioso proyecto que invita a rememorar a uno de los personajes más importantes de nuestra historia a través de la gastronomía y un local que tendrá varios guiños que el comensal deberá descubrir.
Ubicado sobre la calle Juramento del barrio de Belgrano, a pocos metros de la entrada al Barrio Chino, Maradona(10) es una invitación a conectar con aquellas versiones del jugador marcadas en la memoria personal de cada uno a través de la gastronomía. Plagados de picardías y sutilezas, cada detalle del primer restaurante de la franquicia alude a un momento distinto de la vida del autor del gol del siglo.
La experiencia es también una propuesta gastronómica de gran nivel, ya que, detrás del proyecto, se encuentra el grupo Hutong Tang, liderado por Moritán y Candioti, apasionados empresarios gastronómicos que llevan decenas de aperturas de restaurantes en su haber.
La carta fue creada por Hutong Tang y el chef ejecutivo es Ezequiel Benítez. Sus platos fueron especialmente creados para recordar la trayectoria del jugador a través de sabores característicos de las ciudades en donde vivió, e inspirados en los momentos de su vida que quedaron grabados en el recuerdo popular.
Dentro del menú, ya sea para disfrutar al pie/take away o en el estadio/salón, se pueden encontrar un clásico chori de cancha, pizzas, hamburguesas (con blend de carnes de Ohra Pampa), el “Adiós, papito” (los clásicos fish and chips, reversionados con papas y boniatos fritos, con lactonesa de palta y cilantro, que se sirven sobre un papel de diario inglés del 23 de junio de 1986). También es posible degustar la provoleta Cebollitas (con chutney de tomate, cebollas asadas, kale y limón), la Mila de la Tota o el asado en cocción lenta que deja salir limpio el hueso, entre muchos otros. Para quienes busquen un plato vegano, es imperdible la Caesar en Kerala, hecha con aderezo vegano, lechuga capuchina, hongos shiitake, portobellos, croutons y rawmesan.
Para el momento del postre, algunas de las opciones son: La pelota no se mancha (tres leches, maracuyá y cacao negro), Cannolis como en Nápoles (rellenos de ricota, naranja y pistacho), el Vigilante de country (el clásico postre reversionado) o la Batalla del Bernabéu (“un rodillazo en la pera” de chocolate y frutos rojos), entre otras opciones.
Maradona(10) es una experiencia ofrecida al comensal, a su propia relación con la memoria, donde cada plato se entrega como un pase para sus asociaciones personales. El lema del restaurante, “Igual a nadie”, no solo se centra en la vida de Diego Armando Maradona, también es la forma en que se lleva adelante el servicio, la permanente búsqueda de la excelencia y la originalidad, y la implementación ambiental inspirada en la mística irrepetible de Maradona.
“Para mí, este es un sueño hecho realidad. Es el desafío gastronómico más grande que he tenido y que, muy probablemente, tenga alguna vez”, expresa Francisco García Moritán, socio y vocero de Maradona(10), y agrega: “Nosotros no estamos para juzgar de ninguna manera a Diego; es más, no estamos para hablar de él, no pretendemos aportar una mirada porque estamos convencidos de que no la necesita. Diego es Diego, hay una infinidad de Diegos, así que nosotros compartimos su figura e invitamos a cada uno a que viva su propia experiencia”.