La trayectoria de la empresa de más de 25 años, convierte a esta marca en una alternativa sólida y estable, elementos que son claves para una inversión. El canon de ingreso para obtener una franquicia inicia en los US$ 10.000, con una inversión inicial (sin stock) desde los US$ 100.000.
La facturación anual promedio por local es $ 12 millones, con un recupero de la inversión de entre 24 a 30 meses.
Pizza Zeta cuenta con una propuesta gastronómica clara y sencilla y se posicionan como una “alternativa joven, actual y distendida”. “En nuestros locales, sumamos al placer de la buena mesa, el mejor ámbito para el encuentro con los amigos, o para un momento compartido en familia enmarcados en un espacio cálido, muy particular, de estilo industrial vintage, incorporando elementos antiguos, modernos y vanguardistas, creando un lugar renovado y singular”, explican desde la empresa.
“Nuestro objetivo es lograr que el cliente se sienta a gusto y distendido, propiciado por una propuesta gastronómica cuidada. Nos esforzamos para que viva una experiencia única que mezcla un producto de calidad y sensaciones positivas”, agregan.