La pandemia puso de nuevo en el centro de la escena a la familia y al hogar, ubicando a ambos como pilares fundamentales para sobrellevar el obstáculo que significó la aparición del COVID-19 en sus vidas. Hoy se disfruta más cada encuentro, cada instante que se pasa con las personas queridas, y se comienza a proyectar también los escenarios posibles para ellos el día en que no estén más.
Los seguros de vida en ese contexto toman mayor fuerza. “Históricamente asociados como un gasto lamentablemente en nuestro país, hoy este tipo de productos adquieren una nueva significación, más asociada a una inversión que uno hace por el/los otro/s”, precisa Alejandro Irimia, gerente de Administración y Finanzas de Galicia Seguros.
Con el fallecimiento de un familiar aparecen gastos impostergables, que por lo general son bastante elevados. “A los costos iniciales poco felices, se le suman luego los compromisos financieros asumidos y hasta sucesiones que deban comenzar a tramitarse de los bienes del difunto. Allí es donde las coberturas de vida adquieren mayor importancia porque les permiten a los beneficiarios poder hacer frente a estas erogaciones sin ver comprometido sus propios patrimonios”, señala Alejandro.
Si bien la cobertura más básica del seguro de vida es el fallecimiento también cubre otros riesgos adicionales como la incapacidad temporal o permanente, la incapacidad parcial o absoluta, enfermedades o accidentes. Y ahora también se sumó el coronavirus.
El monto máximo que Galicia Seguros paga es $ 6.500.000, y se debe tener en cuenta que todos los productos tienen una cláusula de actualización anual que se rige por el índice CER (Coeficiente de Estabilización de Referencia). El costo mensual de esta cobertura para clientes del Banco Galicia de 35 años es $ 2.299 para mujeres y $ 2.622 para hombres, mientras que para clientes de 55 años asciende a $ 6.146 (mujeres) y $ 8.533 (hombres). En estos casos, la Indemnización Adicional por Enfermedades Graves, con capital asegurado equivalente al 25% del capital asegurado de la cobertura de muerte, es de $ 1.625.000.
Una cobertura mínima de $ 500.000 para clientes de 35 años tiene un valor de $ 177 (mujeres) y de $ 202 (hombres); y para clientes de 55 años la cuota sube a $ 473 (mujeres) y $ 656 (hombres). En todos los casos, a partir de los 64 años y 365 días solo se cubre muerte por enfermedad o accidente.
Los seguros de vida y la deducción del Impuesto a las Ganancias
Otro de los puntos más convenientes de la contratación de un seguro de vida es que se puede deducir del Impuesto a las Ganancias. “Para este año fiscal 2021 se puede deducir hasta $ 24.000 en concepto de cuotas del seguro, de la base imponible del Impuesto a las Ganancias”, explica Irimia.
Hasta que llegó el coronavirus
Tras la aparición del coronavirus, la demanda de los seguros de vida crecieron en promedio un 28% como una reacción a buscar productos de protección ante la incertidumbre que generó la pandemia, situación que desde Galicia Seguros reconocen haber tomado en cuenta para reforzar sus propuestas en los canales de venta.
“Los clientes de Banco Galicia pueden consultar y contratar una cobertura de una manera simple y ágil a través de Online Banking y la App Galicia. En pocos minutos es posible acceder a distintos tipos de cotizaciones para que la persona elija cuál es el plan que mejor se adapta a lo que está buscando”, finaliza Alejandro.