Los voluntarios de Banco Macro que se acercaron a Torre Macro fueron capacitados por Gino Tubaro y su equipo. Tuvieron así la oportunidad única de ensamblar las prótesis 3D, que provocaron una sonrisa en los que aguardaban con ansiedad.
“Cada Manotón es distinto porque vienen personas nuevas a recibir sus prótesis, y lo lindo es poder alcanzarles a los voluntarios de Banco Macro, que por ahí nunca vieron una impresora 3D o quizás no trabajaron con este tipo de tecnología, una iniciativa de tipo social. En una hora y media pueden ensamblar una prótesis y se la pueden entregar a alguien que verdaderamente la necesita y la va a usar. Con esta actividad es posible tomar dimensión de las cosas buenas que se pueden hacer con la tecnología y ojalá que esto sirva para que esta empresa, y cientos de compañías como esta, se acerquen a este mundo”, asegura Gino Tubaro, de Atomic Lab.
En la actualidad, hay una necesidad de cubrir la provisión de prótesis mecánicas y las soluciones actuales que ofrecen los privados, obras sociales, y el Estado entre otros, no son fáciles de adquirir para todos.
Las prótesis tienen un costo elevado, ya que van de los US$ 7.500 a más de US$ 15.000. Sin embargo, con una impresión 3D los costos se reducen drásticamente.
Atomic Lab entrega manos y brazos impresos en 3D de manera 100% gratuita a cualquier persona que la necesite y solicite. Hay más de 3.000 pedidos realizados.
Hasta la actualidad se organizaron 21 “Manotones” en Uruguay, México, Brasil y Argentina, donde se pudieron confeccionar prótesis de diversos tamaños.
Atomic Lab desarrolló la primera plataforma de pedido de manos mecánicas 3D, que conecta usuarios con embajadores agilizando la entrega de prótesis en otros países.
“Desde que Eneas tiene un año que estábamos buscando una prótesis para él. Por redes sociales y por televisión vimos el trabajo que realiza Gino y nos anotamos. Hoy con 5 años, la prótesis llegó, y este es un momento muy esperado, muy deseado por toda la familia. Hace un tiempo Eneas empezó a decir: papá quiero una mano, quiero tener dos manos, y gracias a este programa tuvimos la suerte o la gracia divina de salir beneficiados y recibirla. Ahora él está feliz, piensa que es un superhéroe”, asegura Diego Zaragoza, papá de Eneas Zaragoza que recibió una prótesis 3D.