En esta edición nos ponemos la blanca y celeste y salimos a la cancha con dos jugadores de la comunicación en Córdoba: Dolores (Lola) Vidal. Brand creator - Co- founder Cooking Agencia Creativa y Emilio Zelada, Director Creativo de Mulato. Nos cuentan su mirada sobre cómo viven y sobreviven las marcas en esta época mundialista.
Brandgentina: La marca Argentina emociona al mundo
Por Dolores (Lola) Vidal. Brand creator - Co- founder Cooking Agencia Creativa
Messirve comenzar esta nota celebrando el mundial y todo lo que los argentinos inspiran al mundo en este acontecimiento deportivo.
Soy futbolera, hincha y jugadora. Para lamento de muchos y orgullo de otros me declaro maradoniana.
Sin entrar en dicotomías y fragmentaciones (cansadxs de eso) Argentina en este contexto despierta pasiones, llanto, alegría, abrazo, crítica, unión, encuentro, puteada, exitismo, pero sobre todo talento y habilidad para jugar y darlo todo.
Las marcas locales reciben y bajan estrategias en bandeja para salir a contar nada más y nada menos que nuestra verdad. Y todo lo que conecta con nuestra verdad nunca tuvo tanto efecto en las audiencias como hoy. Audiencias que alientan y piden consistencia en nuestro storytelling, que piden responsabilidad y emocionalidad, conciencia y autenticidad.
Por eso la marca Argentina se expande al mundo con un mensaje real, que no vende humo, que a través de su juego y de su hacer es consistente. Si no le preguntemos a Bangladesh su amor por la albiceleste.
El caso de las campañas de Pepsi y Quilmes, tan antagónicas en sus mensajes y estéticas, la primera absolutamente sensorial y lúdica, la segunda 100% sentimiento, me generan lo mismo: emoción y orgullo de ser Argentina.
El mundial quizás es la oportunidad para que las marcas conecten con sus audiencias globalmente, para que griten con pasión sus propósitos, su verdad, sin fingir. Retomar lo colectivo como construcción y así llegar cada una a su hinchada de manera genuina.
La creatividad y la pelota
Por Emilio Zelada, Director Creativo de Mulato
La publicidad y el Mundial siempre se llevaron bien, es una dupla que desde hace años cautiva a miles de personas. Es la posibilidad de conectar con las emociones sin importar la clase social o la edad. Un mundial genera eso.
Así como el mundial genera pasiones, las publicidades del mundial también. Todos esperamos los tradicionales spots, y no sólo los publicitarios.
La mayoría de marcas se suben: Las grandes aprovechan la oportunidad para afianzar su vínculo con sus públicos con comerciales épicos y emocionantes. Otras en cambio, van por acciones más tácticas y muchísimas (la base de la pirámide quizás) utilizan sus redes sociales para hablar del tema y desde sus universos, hacer un aporte.
Por lo cual, hay mucho ruido comunicacional en torno al evento deportivo. Entonces, ¿cómo diferenciarse en un entorno de saturación de mensajes épicos, festivos y motivacionales?
La respuesta siempre fue la creatividad. Los mensajes más creativos, interesantes, ocurrentes o nunca explorados serán (como en cualquier contexto) los que más se destacarán, más se recuerden y los que más cerca de cumplir sus objetivos de marketing estén.
La creatividad bien entendida, no debería ser una secuencia de ocurrencias originales sino también entender los contextos, los tiempos y ser preciso en los mensajes: equivocarse en el qué decir siempre fue una posibilidad, pero hoy es mucho más fácil quedar expuesto y retroceder casilleros en el tablero del marketing.
Lo último: la publicidad y el mundial serán una hermosa dupla, hasta que la suerte de la selección los separe.