La agencia inició sus actividades en el año 2007 de la mano de Tomás Smekens, Licenciado en Comunicación Audiovisual que luego sumó a su amigo y compañero de los años universitarios, José Comba. Ambos pensaron la agencia y con el tiempo y el paso de ambos por distintos trabajos, lograron concretar el deseo del proyecto propio.
“Mis inicios en este rubro fue como camarógrafo en Canal C pero no lo disfrutaba porque me gustaba más la producción. Luego decidí estudiar publicidad y en ese momento sentí que realmente había encontrado mi vocación”, cuenta Tomás Smekens.
La oportunidad de trabajar con Osde -empresa que mantienen su la cartilla de clientes- fue el puntapié para dar inicio a Plan 9 Comunicaciones junto a un tercer socio, que hoy ya no forma parte de Rabbit. “Siempre hubo una puja por el enfoque de la agencia, yo quería ir por el lado de la comunicación más publicitaria e integral, y mis socios por el lado de lo audiovisual”, explica Smekens.
De allí es que nace Rabbit con Tomás y José como socios. Rabbit que en inglés significa conejo fue el nombre elegido por el sentido lúdico de este animal, que siempre va en la búsqueda de nuevas “madrigueras” que para la agencia son las oportunidades, “Hoy estamos más maduros y generamos vínculos con nuestros clientes, somos casi sus analistas y de hecho tenemos una relación de larga data con la mayoría”, expresan.
Con Osde hacen mucha comunicación interna y la producción de sus eventos. Además de lo tradicional, les gusta hacer propuestas novedosas para los clientes, como el ciclo de entrevistas que preparan para la cadena de supermercados Libertad. O los mini documentales que preparan para los canales de YouTube de los Laboratorios LACE, y su nueva unidad de negocios LACEVet.
Además, en su lista de clientes hay empresas como Prominente, Urgencias, Cooperativa Ganadera Agrícola y de Consumo Porteña LTDA. Han trabajado en las campañas electorales de la Facultad de Lenguas y Odontología de la UNC, las cuales consideran como sus mejores clientes: “Nos gustan los clientes que se dejan asesorar, que te escuchan y que te dejan volar, esos para nosotros son clientazos”, explican.
En la agencia trabajan por proyectos y tienen un equipo de colaboradores que se adapta a cada uno de ellos. Con casi una década de trabajo han aprendido que lo importante es estar cerca de los clientes y generar vínculos, tener la confianza para proponer nuevas ideas que rompan el molde, los entusiasmen y los haga salir de la caja.