“Belt surge de la pasión por un deporte legendario que un padre le compartió a su hijo revelándole sus valores de fondo y todas las bondades que ese entrenamiento físico genera: el boxeo. Ese deporte hoy se complementa al entrenamiento funcional y ofrece una actividad física que es tendencia mundial. Belt trae el fitboxing a Córdoba, para que todos puedan vivir la experiencia y disfrutar los beneficios de esta práctica”, nos cuenta Gastón.
El proyecto se inició hace aproximadamente un año y fue tomando forma con los familiares y amigos que se entusiasmaron con esta propuesta innovadora y se incorporaron a la sociedad.
Transitando su primer mes, Belt ya posee una diversidad de usuarios que reflejan la satisfacción de realizar una actividad física entretenida, dinámica e integral en un tiempo acotado.
“El fitboxing es una disciplina que complementa el entrenamiento de boxeo con ejercicios del funcional, en una dinámica de alta intensidad que ofrece un trabajo integral del cuerpo, potenciando la resistencia, fuerza y coordinación, generando a su vez una liberación de estrés. Este entrenamiento se adapta a las condiciones físicas y necesidades del usuario, ya que será este quien determine la intensidad que quiera y pueda dar en cada ejercicio”, nos aclara Aliaga de Zavalia.
Son 550 m2 en un espacio muy logrado a nivel estético y funcional, en el que pueden entrenar hasta 45 personas al mismo tiempo (hoy 15 por disposición del COE) con buena musicalización e instructores calificados. Con Everlast y Gatorade como marcas asociadas, Belt busca potenciar su presencia en Córdoba y extender su propuesta a nuevos destinos en el corto plazo.
La rutina explicada por Gastón
“Nuestra modalidad consiste en una dinámica grupal que contiene módulos de Funcional y Box, complementados para darte un entrenamiento integral y divertido.
La dinámica de 50 minutos comienza con una activación de movimientos articulares y entrada en calor para luego continuar con los 7 módulos, llamados “rounds”, de 3 minutos de actividad por 1 minuto de descanso, concluyendo con 7 minutos de elongación y vuelta a la calma.
En consideración a las medidas de protocolo dispuestas por el COE, actualmente cada usuario tiene a su disposición un rociador con el cual debe desinfectar sus elementos al finalizar la clase”.