De cómo cultivar 5.000 plantas de lechuga con 250 litros por planta (contra 2.500 del sistema tradicional)
El cultivo se llama “hidropónico” y consiste en disminuir los factores negativos del cultivo vegetal asociados al contacto con el suelo, sustituyéndolo por cultivo basado en agua y aplicando técnicas de fertilización alterna avanzadas. Y es a eso precisamente a lo que se dedica la gente de Abuelita María, una cooperativa ubicada en Huerta Grande que produce actualmente 5.000 plantas semanales de tres variedades de lechuga (manteca, mimosa francesa y morada).
El predio cuenta con 140 hectáreas, dentro de los que se trabaja sobre un área de 3.000 m2 de invernadero. “Nuestras cifras son contundentes: mientras que para la lechuga cultivada en tierra donde el riego es por manto hacen falta cerca de 2.500 litros de agua por planta desde su nacimiento hasta la cosecha, el riego por goteo reduce esa cantidad a 250 litros”, explica la arquitecta Marcela Heinze, una de las dueñas de este emprendimiento. (Más sobre este cultivo y el pack ecológico en el que se comercializa, en la nota completa).