Aunque el “dato del año” podría ser que la televisión por cable ya tiene más audiencia que las señales abiertas en Argentina, estrictamente sólo 20% de los hogares tiene TV abierta “pura” ya que el otro 80% tiene las señales abiertas en la grilla de sus 100 canales de cable o DirecTV. Sobre TDA todavía no hay cifras integradas.
Pero además, la irrupción Netflix (caminos a los 25 millones de suscriptores en EE.UU.) generó el fenómeno "canchas de padel": Arnet Play, On Video, Total Movie, Claro, Qibit, Vicco son algunas de los sistemas OTT (over the top) que saltean las señales y distribuidoras tradicionales para llegar directamente al hogar.
Y cómo si todo esto fuera poco, las propias señales como Fox Sports o ESPN tienen también sus canales on line que no distribuyen por los cables, sino directamente a las pantallas (de PC y Smart TV... o TV “cualunques” con sus correspondientes “cajitas”, desde Apple TV a tantísimas más).
¿Ahí termina el merequetengue? No: los sistemas de video on demand también prolifera en la región y le agregan más posibilidades de elección a un televidente que -además- es requerido cada vez más tiempo por mails, web y redes sociales.
¿Seguiremos viendo telenovelas como “Solamente Vos” en prime time dentro de 3 años? Nadie lo sabe, pero desde México llega una señal: algunas telenovelas transmitirán los capítulos primero por su sitema OTT (tipo Neflix) antes que por sus señal “abierta”.
La única certeza parecería ser que los eventos deportivos seguirán siendo en “vivo, directo y simultáneo” desde el lugar de los hechos, al igual que los noticieros que seguirán funcionando como “ancla” horaria. Todo el resto de la historia, parece, está por escribirse.
El negocio de la tele, raro: todo mezclado, todo mezcludo entre aire, cable, OTT, PPV e internet
Hubo un tiempo que el negocio era fácil: mucha gente veía Rolando Rivas a las 21 (pero mucha, mucha), los anunciantes invertían en la tanda y el canal hacía su negocio redondo, todo en blanco y negro y a través de ondas hertzianas.
De aquel planteo lineal no queda nada. Hoy todo es una maraña donde conviven las viejas señales abiertas, el cable, la TDA, la televisión por internet y los sistemas pay per view, además plataformas de contenidos propias de cada vez más señales.
"El sector vive una gran angustia -explica Ariel Barlaro de Dataxis- nadie sabe si los nuevos jugadores se quedarán con el negocio ni cómo evolucionarán los formatos actuales".
(Una mirada al confuso mundo de la TV y algunos caminos posibles, en nota completa).