Los activos financieros argentinos no tuvieron una buena jornada en el día de ayer. Tras las declaraciones del miércoles de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) sobre su política monetaria, subió el dólar a nivel global, cayeron las materias primas y suben las tasas de interés más cortas. El contexto global, por lo tanto, se tornó más adverso para la Argentina.
El nuevo sendero de tasas de interés que trazó la Fed fue más agresivo de lo que se esperaba previamente, proyectado dos subas de tasas en 2023. La decisión de la Fed de mantener las tasas en el corto plazo estuvo acompañada también por la determinación de continuar con el programa de compras mensuales de activos por u$s 120.000 millones, aunque el banco central estadounidense alertó sobre el inicio de conversaciones para el desarme de esas posiciones.
La primera reacción del mercado fue una fuerte suba en el tramo medio de la curva, tramo en el que impacta la subas de tasas en 2023. Este proceso de suba de tasas de interés generó, en paralelo, una suba en el dólar a nivel global, que muestra la suba semanal acumulada más alta en 9 meses. Con el rally actual, el dólar index regresó al mayor nivel en dos meses.
Las materias primas y el dólar suelen tener correlación negativa. Esto significa que el rally en el dólar tiende a venir asociado también a una caída en las materias primas. Con la suba del billete, de casi 2% en el último mes, la soja se desplomó 13,9%, y el trigo y el maíz cayeron 8% y 6% respectivamente. El oro y la plata, por su parte, acumulan bajas respectivas de 4,6% y 8,2%. El petróleo, a contramano, logró subir 6%.
Manuel Carpintero, porfolio manager de Nash Inversiones, explicó que la Fed dio señales de tightening más rápido de lo que se esperaba.
"Creo que veremos un desarmarse posiciones que apostaban a un contexto de mayor inflación y por ello vemos que los commodities, como los metales y granos operan con fuertes caídas. Creemos que esto debería también gatillar un ajuste en acciones de mercados emergente, y aunque en mucho menor medida, en acciones americanas", proyectó.
Por su parte, Juan Cruz Lekovic, fund manager de Schroders, explicó que la curva soberana de Estados Unidos se elevó entre 5 y 10 bps su rendimiento en el tramo de 2 a 10 años, reflejando sorpresa "hawkish" por parte de la Fed y de una política monetaria que comenzaría un sendero hacia su normalización.
"Las expectativas inflacionarias del mercado se mantuvieron inalteradas y siguen ancladas al objetivo de largo plazo de la Fed pese a la actualización sobre el tema y algunas advertencias que dio su presidente Jerome Powell en conferencia de prensa. En este contexto, el dólar se apreció con bastante fuerza, llevando al Dolar Index nuevamente arriba de 91 pts. Esto se dio con las principales monedas Desarrolladas y Emergentes depreciándose a la vez que los principales índices accionarios cerraron en terreno negativo", explicó el Fund manager de Schroders.
Pedro Siaba Serrate, estratega de Portfolio Personal Inversiones (PPI), remarcó la reacción del mercado da cuenta de una Fed un poco más hawkish, pero que no pierde la confianza del mercado.
"Es interesante que la reacción en las tasas nominales, que vimos todos, fue acompañada por un salto aun mayor por las tasas reales de los TIPs, disminuyendo la inflación esperada por el mercado tanto a 5 años (en menor medida) como la de 10 años. En el plano emergente, la lectura del mensaje fue la misma. Basta ver la performance de las monedas emergentes depreciándose frente al dólar y los títulos de deuda un poco más débiles", comentó el especialista de PPI.
IMPACTO EN ARGENTINA
Analistas alertan que una continuidad en la caída en las materias primas implicará mayores riesgos para la Argentina. La suba del dólar, alentada por una Fed más contractiva, haría que los flujos regresen a Estados Unidos para aprovechar un ciclo de tasas más altas en el futuro.
Pero la principal preocupación se centra en los efectos que tendría la apreciación del dólar y en que la caída en las materias primas pondría mayor presión sobre la estabilidad cambiaria futura y dificultaría el proceso de acumulación de reservas por parte del Banco Central (BCRA) en los próximos meses.
Es que cabe recordar que uno de los factores que posibilitó que la autoridad monetaria recupere reservas en los últimos meses fue precisamente el boom del precio de los commodities. Desde que comenzó el año, la fuerte liquidación de divisas, impulsadas por la súpersoja, le permitió al BCRA obtener un saldo neto superior a los u$s 6200 millones en el MULC.
"Una apreciación global del dólar tendría un doble impacto para la Argentina. Por un lado, la depreciación de las monedas de nuestros socios comerciales pondría presión deprecatoria sobre nuestra moneda. Por otro lado, la apreciación del dólar podría presionar sobre commodities", indicó Juan Cruz Lekovic, fund manager de Schroders.
Adrián Yarde Buller, economista y estratega jefe de Facimex Valores, coincidió en que "el golpe para la Argentina estaría más asociado a una posible corrección de los precios de los commodities y un escenario de menor crecimiento global".
MIRANDO LAS RESERVAS Y LOS BONOS
Parte de la mejora en la renta fija argentina se debió en los últimos meses a la fuerte suba en las materias primas que le permitió al Banco Central acumular reservas y con ello generar confianza sobre el pago de la deuda argentina, haciendo que los bonos logren recuperarse.
Si el ciclo de suba de materias primas inicia una pausa, los bonos podrían verse perjudicados. De todos modos, y dado que el rebote es prematuro para ver un avance sostenido, el impacto en la deuda local podría ser limitado por ahora.
En cuanto al impacto en los bonos, el titular de AdCap, Javier Timerman, señaló que el sesgo más hawkish de la Fed tendría un impacto neutral en los bonos argentinos, dado que vienen principalmente operando de cara a los avances en las negociaciones con los organismos de créditos".
Asimismo, el economista explicó: "Sí vemos un impacto más claro en los bonos de la región, que podrían ver cierta debilidad ante la eventual suba de tasas de la Fed".
En cuanto a la renta variable en emergentes, Timerman agregó: "Las acciones en la región tienen más correlación con los mercados globales que las argentinas, pero a mi juicio esto no va a tener impacto porque el tema inflacionario y de tasas está bastante controlado. Obviamente, el día que salen los anuncios hay chispas, pero debería haber una corrección muy fuerte en mercados globales para que impacte en Latinoamérica".