El célebre índice Big Mac que elabora el semanario británico The Economist, que compara el precio de la tradicional hamburguesa en más de 100 países y 36.000 restaurantes de 56 países para medir cuánto vale una moneda con respecto al dólar, reflejó en su última actualización que la divisa estadounidense aparece más apreciada frente a la mayoría de las monedasque en cualquier momento de las últimas tres décadas. En ese ranking, Argentina se ubica entre los países cuya moneda aparece más subvaluada frente al billete verde, sólo superada por Turquía, Ucrania y Rusia.
El índice, creado en 1986, se presenta como una guía informal para conocer el nivel al que están valuadas las monedas de todo el mundo. El índice basa su sistema en la teoría de la paridad del poder adquisitivo (por sus siglas PPA), según el cual con un dólar convertido a la divisa local de la nación en el que nos encontremos, se debe poder comprar la misma cantidad de bienes y servicios en cualquier país del mundo.
Una prueba de cómo se fortaleció el dólar durante 2018 es que en Reino Unido, país de origen de la publicación, el Big Mac ya cuesta un 27% más barato que en EE.UU. cuando históricamente ha sido más caro. Sólo Suiza y los países nórdicos aparecen con sus monedas apreciadas frente a la divisa estadounidense.
En el caso de Argentina, el precio promedio relevado por el semanario fue de $ 75 por sandwich, es decir u$s 1,96 frente a los u$s 5,58 actuales que vale en EE.UU.
Otros ejemplos
En Brasil, la hamburguesa cuesta 16,90 reales (u$s 4,55), lo que implica que el real está infravalorado en el 18,5%.
En Chile, el cliente necesita gastar 2640 pesos en el sándwich (u$s 3,91), lo que representa una subvalorización del 30,3% en relación a la moneda estadounidense.
El Big Mac de China sale por 20,90 yuanes (u$s 3,10). La moneda se subvaloriza en un 45,3% si se compara con el dólar.
Las razones de la apreciación del dólar
Según The Economist, en 2018, tasas de interés y recortes de impuestos más altos hicieron los activos estadounidenses más atractivos, aumentando el valor del dólar. Esta fue una mala noticia para las economías emergentes con deudas en dólares. Sus monedas se debilitaron cuando los inversores se agitaban. Al final del año, los ingresos estadounidenses comenzaron a caer a medida que la economía global se desaceleró. Pero el dólar hasta ahora se ha mantenido fuerte.
El Índice Big Mac fue creado en 1986 con base en la teoría económica de la Paridad del Poder Adquisitivo, que considera que los precios nacionales para un mismo producto serían iguales cuando se miden en una misma moneda, sin contar los costos de transacción y de barreras al comercio internacional. El índice sería una guía para analizar el cambio de forma más comprensible para las personas en general.
La molestia del kirchnerismo
Como tantas otras estadísticas el célebre índice sufrió distorsiones en Argentina por la intervención oficial durante el kirchnerismo.
Al ser al mismo tiempo una medida de precio y de tipo de cambio, el indicador llamó la atención del gobierno de Cristina Kirchner, porque restaba credibilidad a las cifras de inflación del Indec.
El resultado fue que, desde enero de 2011 hasta junio de 2012 cuando el precio del sandwich saltó 26% de una sola vez los precios locales del Big Mac se movieron muy por debajo de los del resto de las hamburguesas de la cadena.
The Economist toma en consideración el precio de la hamburguesa y divide el costo en pesos ($ 75) por el valor del sándwich en Estados Unidos (u$s 5,58). Esta operación arroja el tipo de cambio implícito (TCI) que se toma en cuenta para saber si la moneda está apreciada o subvalorada.
En el caso argentino, el TCI sugerido por el semanario es de $ 13,44. La diferencia entre ese valor y los actuales $ 38,16 (tipo de cambio minorista de referencia del BCRA al 11/01) sugiere que el peso está subvaluado en 64,78%.
Se trata de un porcentaje elevado si se considera que en enero de 2016, poco después de la salida del cepo cambiario, el peso estaba un 51,5% por debajo del valor promedio en los Estados Unidos.
Los más y los menos
Entre las monedas relevadas, Argentina figura en el cuarto lugar entre las subvaluadas. En ese ranking la superan Turquía (64,2%), Ucrania (65,2%) y Rusia (70,4%).
En el país gobernado por Vladimir Putin, por ejemplo, un Big Mac cuesta 110 rublos (u$s 1,64).
Por el lado de las monedas apreciadas frente a la divisa estadounidense, el podio lo ocupan el franco suizo y las coronas sueca y noruega.
En Suiza, los clientes de McDonald's tienen que desembolsar 6,50 francos suizos (u$s 6,62) por el sándwich, lo que muestra que esa moneda está sobrevalorada en un 19%.