ZOE BRAZIULIS
Una nueva medida del Fondo Monetario Internacional (FMI) podría afectar de forma positiva a la billetera del país: la posibilidad de que la Argentina reciba u$s 4350 millones de parte del organismo internacional gracias a los Derechos Especiales de Giro (DEG) se observa cada vez más cercana.
Luego de que el directorio del FMI aprobara el pasado viernes la asignación de u$s 650.000 millones en concepto de DEG -el desembolso más grande de la historia del organismo hoy liderado por la búlgara Kristalina Georgieva- se espera el visto bueno de la Junta de Gobernadores para aprobar la inversión que se encuentra planificada para fines de agosto.
La aprobación de parte de esta Junta requiere el apoyo de los países miembros con una mayoría del 85% de la totalidad de los votos positivos de quienes participan en el Departamento de DEG, es decir, todos los miembros del FMI al día de hoy.
"Esta es una inyección de ánimo para el mundo. La asignación de DEG reforzará la liquidez y las reservas de todos nuestros países miembros, afianzará la confianza y promoverá la resiliencia y la estabilidad de la economía mundial", recalcó Georgieva, impulsora del proyecto.
El objetivo de esta inyección de dinero para todos los países miembros es el de ayudar a su sustento en el marco de la crisis epidemiológica causada por el Covid-19 en todo el mundo, con especial foco en las naciones más vulnerables ya que también se encuentra en tratativas la idea de crear un fideicomiso de "Resiliencia y Sostenibilidad" para repartir el excedente de los países más ricos con los más endebles.
Por lo pronto, aún se debe definir qué países ingresarían a la lista de "vulnerables" y si la Argentina -miembro del G20 como nación emergente- podría acceder, un reclamo que Martín Guzmán, ministro de Economía de la Nación, no dejó de plantear en su última reunión con los directivos del organismo en Venecia.
"Nos mantendremos en estrecho contacto con nuestros países miembros en los meses venideros para definir opciones viables que permitan la canalización voluntaria de DEG de los países más ricos para respaldar a los más pobres y los más vulnerables", indicó la titular del FMI.
Considerando la deuda de alrededor de u$s 44.000 millones que la Argentina mantiene con el FMI, Guzmán espera llevar a buen puerto las incipientes negociaciones con el organismo para reestructurar los pagos.
En este marco, los u$s 4350 millones en concepto de DEG que recibiría la Argentina claramente no resultan suficientes para afrontar el pago completo, sin embargo, pueden ayudar con los vencimientos por u$s 3800 millones que el país deberá pagar este año, aunque el dinero no necesariamente debe ser usado para saldar parte de la deuda con el organismo.
El monto final en concepto de DEG destinado a la Argentina -u$s 4350 millones- se calcula a raíz de la cuota del país con el FMI, la cual actualmente es del 0,7%. Pero, ¿Qué son los DEG y cómo funciona este sistema?
QUÉ SON LOS DERECHOS ESPECIALES DE GIRO Y CÓMO FUNCIONAN
Tal como plantea el FMI, los Derechos Especiales de Giro (DEG) son activos de reserva internacional creados por el organismo con el fin de "complementar las reservas oficiales de los países miembros". Así, este sistema, creado en 1969 ante el modelo de paridades fijas establecido en el acuerdo de Bretton Woods, "representa un activo potencial frente a las monedas de libre uso de los países miembros del FMI".
En un principio, el DEG se definió como un valor equivalente a 0,888671 gramos de oro fino, el valor del dólar en ese momento. Sin embargo, al desplomarse en 1973 el sistema de patrón-dólar establecido en Bretton Woods, el DEG pasó a definirse en base a una cesta de monedas que, actualmente, incluye al dólar estadounidense, al euro, al renminbi chino (yuan), al yen japonés y a la libra esterlina.
De esta forma, el valor de este se establece sumando determinados montos de cada una de las monedas de la cesta valorados en dólares estadounidenses, sobre la base de los tipos de cambio cotizados a mediodía en el mercado de Londres. Al día de la fecha, sábado 17 de julio, 1 DEG equivale a u$s 1,42.
La composición de la cesta se somete a un examen en el Directorio Ejecutivo cada cinco años. Así, en 2016 se sumó al yuan como moneda de libre uso y se comenzó a considerar como parte de la canasta del DEG.
En la misma revisión, se estableció que DEG 204.100 millones (equivalentes a unos USD 285.000 millones aproximadamente) serían creados y asignados a los países miembros del FMI con el fin de otorgarlos ante una "necesidad mundial", tal como establece el mismo FMI: "Las asignaciones generales de DEG deben basarse en una necesidad mundial y a largo plazo de complementar los activos de reserva existentes".
Actualmente, Georgieva elevó ese monto para desembolsar u$s 650.000 millones con el fin de amparar a los países miembros ante la crisis del COVID-19 y colaborar con su recuperación. El FMI puede otorgar DEG a los países de acuerdo a sus cuotas con este, de esta forma, la Argentina obtendría el 0,7 % del monto establecido.
Tal como explica la página web del organismo, "los tenedores de DEG pueden obtener estas monedas (usd, euro, renminbi, yen o libra) a cambio de sus DEG mediante dos operaciones: primero, la concertación de acuerdos de canje voluntario entre países miembros y, segundo, la designación, por parte del FMI, de países miembros con una sólida situación externa para que compren DEG a países miembros con una situación externa poco firme".
Las designaciones generales del DEG sólo se han efectuado en 3 ocasiones: la primera asignación, por un total de DEG 9.300 millones, se distribuyó entre 1970 y 1972; la segunda, por DEG 12.100 millones, se distribuyó entre 1979 y 1981; y la tercera, por DEG 161.200 millones, se efectuó el 28 de agosto de 2009 a raíz de la crisis financiera del 2008.
Ahora, existe la posibilidad de una cuarta entrega del DEG, lo que no sólo ayudaría a los 189 países miembros del FMI a paliar los efectos de la pandemia, sino que le permitiría a Martín Guzmán respirar más tranquilo en sus acuerdos con el Fondo.