Las reservas internacionales del Banco Central (BCRA) mostraron hoy un importante salto. En términos brutos, las mismas se incrementaron en u$s 4258 millones y finalizaron la jornada en u$s 46.306 millones, según estimó la entidad de manera preliminar en su resumen de variables financieras que publica diariamente.
Este aumento se debió al ingreso de u$s 4334 millones que recibió hoy el país por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI), en concepto de Derechos Especiales de Giro (DEG), los cuales fueron anunciados en marzo pasado e impactaron de manera directa en las arcas de la autoridad monetaria.
El FMI giró un total de u$s 650.000 millones a sus países miembros, con el objetivo de reforzar la liquidez global afectada por la crisis de la pandemia. El monto correspondiente a Argentina se debe a que el país tiene una cuota de 0,67% de participación en el organismo, detallaron desde el Ministerio de Economía.
Con este salto, las reservas brutas llegaron a la cifra más alta de la administración actual y volvieron a los niveles de finales de octubre de 2019, días después de las elecciones generales, en medio del descenso que mostraban en ese momento, con las fuertes tensiones cambiarias y la salida de depósitos privados que se produjo después de que Alberto Fernández ganara las PASO.
No obstante, este incremento en las reservas podría ser transitorio. Los DEG pertenecen al Gobierno y están depositados en el BCRA, en una cuenta perteneciente al Tesoro. El Gobierno tiene libre disponibilidad, por lo cual puede utilizarlos para pagarle al mismo FMI o pedirle al Central que los convierta en dólares para otros destinos.
Entre septiembre y diciembre próximos, el Estado tiene vencimientos de deuda por más de u$s 4.100 millones con el FMI, lo que representa un 95% de los DEG recibidos. Se espera que el Gobierno utilice este monto para pagarle al mismo organismo y, en ese caso, casi la totalidad del dinero recibido se iría en dichas cancelaciones.
"Por no tener un acuerdo con el Fondo ni acceso a los mercados, esos DEG se va a ir dilapidando de acá a diciembre o enero próximo en pagos a organismos. No se no podrán usar para ampliar el colchón de reservas netas, necesarias para anclar expectativas y financiar importaciones para impulsar la actividad", indicó Federico Furiase, director de Anker.