La edad biológica es un indicador de la edad de las células que puede servir para conocer el estado real del cuerpo. No podemos detener el paso del tiempo, sin embargo, todo parece indicar que sí es posible detener los pasos que nuestro cuerpo y mente van dando en el tiempo ya que la edad biológica puede variar considerablemente según la genética y el estilo de vida que adopte cada individuo.
Tener buenos hábitos de vida significa revitalizar y equilibrar el sistema inmunológico y la función metabólica, dando importancia a cinco pilares fundamentales: la calidad de calorías y no solo la cantidad que ingerimos (sólidos y líquidos), la práctica de actividades físicas, mantener bajo control el nivel de estrés, evitar el consumo de fármacos (sobre todo de auto prescripción) y un descanso saludable, sin necesidad de ansiolíticos.
Aplicar esta fórmula no es magia: es constancia y hábito. En Argentina hay casos que pueden demostrar el éxito. Uno de ellos es el de Miguel Cané quien decidió ajustar sus hábitos de vida y disminuir su intenso ritmo empresarial que a lo largo de 50 años lo mantuvo a la vanguardia en el mundo empresarial y directivo (de Cámaras del sector de las Telecomunicaciones y del Turismo Médico) que le fueron provocando, junto al nivel de incertidumbre que sufrimos, diversos malestares a su salud que dejaba siempre para atender más adelante.
Frente a esta realidad y con algunos problemas y un incidente cardíaco en los EEUU en enero del 2022, Cané decidió someterse a un plan personalizado de salud con el equipo multidisciplinario de profesionales de su establecimiento y comenzar un tratamiento riguroso. Probó de su propia medicina y hoy los resultados sorprenden: Cané además de reforzar sus buenos hábitos de vida, incorporó adicionalmente a su plan una terapia que se basa en el aporte de peptonas, que actúan como "nutrientes celulares". Este tratamiento, usado frecuentemente en Suiza, Francia, Alemania y otros países líderes en medicina preventiva y de antienvejecimiento, consiste en ir incorporando estos nutrientes al tejido correspondiente y estimular biológicamente las células logrando de esta manera mejorar la edad biológica del organismo.
Mala alimentación, tabaquismo, estrés, polución ambiental y otras patologías y disfunciones pueden tratarse con esta terapia que actúa como un excelente complemento de terapias alópatas. “Es necesario un compromiso que permita el seguimiento y control para lograr los resultados esperados”, señaló el dr. Christian Leiva, director médico de la Posada del Qenti.
“Miguel es muy especial, con conciencia, actitud y aptitud logró mejorar sustancialmente sus índices de masa muscular y postura corporal, índice de glucemia y funcionamiento general de sus órganos que hoy corresponden a una persona de 65 años”, indicó Christian, y explicó además que en la actualidad, los controles periódicos de Cané y un estilo de vida adaptado a sus obligaciones le permiten mostrar una edad biológica admirable.
Detener el paso del tiempo, o ralentizarlo, ha sido desde el principio de todos los tiempos un tema con el cual han fantaseado diversas culturas. En la actualidad, la edad biológica ya se ha podido revertir. Los científicos afirman que los programas de antienvejecimiento son una realidad concreta.