Para tomar dimensión, se trata de un lugar enorme en el cual se desparraman stands de proporciones para albergar tractores y cosechadoras, pistas de destrezas de las 4x4, plots de empresas de semilleros (pequeños lotes de soja, maíz y girasol), otros stands de maquinaria pero más pequeña –sembradoras y forrajeras-, Ag tech (empresas tecnológicas agropecuarias) y también bancos, instituciones oficiales, las provincias agropecuarias (incluida Córdoba) y empresas de servicios varios.
Todo distribuido en 14 calles internas de este a oeste y 8 de norte a sur, en el kilómetro 225 de la autopista Buenos Aires-Rosario, dentro -y alrededor- del Autódromo San Nicolás.
Es la mayor cita del agro junto a la Exposición Rural de Palermo y a Agroactiva –esta última menos conocida pero igualmente muy convocante-. Cada una tiene su especificidad: la Rural convoca a la ganadería, Expoagro está más volcada a la agricultura (se desarrolla en marzo para poder mostrar los cultivos principales en época de madurez) y en junio Agroactiva -que también tiene un predio permanente en Armstrong, Santa Fe- que es más de maquinaria agrícola. Igualmente en las tres se cruzan todas las actividades.
El dinero que se movió, las marcas que lo hicieron y todo lo que pasó en esta edición:
-La expo es una oportunidad de compras y ventas, apalancadas en las ofertas de créditos bancarios a tasas fijas en pesos con bajo interés. El principal oferente es siempre el Banco Nación: para esta edición la entidad que preside Eduardo Hecker había anunciado que ponía $ 16.000 millones en ofertas de créditos, pero terminó cerrando 7.520 operaciones de maquinaria de fabricación nacional por un valor estimado que rondó los $ 29.300 millones.
-Martín Schvartzman, CEO de Exponenciar, informó que la muestra tuvo más de 100.000 visitantes y hubo US$ 1.500 millones en volumen de negocios. Para ilustrar, dos casos cordobeses: Akron, la fabricante de tolvas de San Francisco, realizó 447 cotizaciones y durante los días de la feria concretó ventas por $ 200 millones. Metalfor de Marcos Juárez, vendió 30 pulverizadoras autopropulsadas (el valor de cada unidad supera los $ 13.000.000) más 6 equipos de arrastre y 10 tolvas. Hay que aclarar que muchas de las operaciones se concretan por la modalidad del canje de granos (el comprador la paga con parte de su cosecha).
-La muestra es la gran vidriera para el negocio de los insumos agropecuarios. Y la fecha no es casual: el año del campo se mide entre mayo y mayo (cuando arranca la siembra de granos finos, principalmente trigo y cebada; y cuando se cosechan los ‘gruesos’ soja y maíz). Es decir que a marzo, los chacareros empiezan a calcular sus costos (semillas, fertilizantes y agroquímicos) y los contratistas evalúan la renovación de los ´fierros’. Estos son lo más imponentes en Expoagro, principalmente los tractores y cosechadoras de las marcas internacionales: John Deere, Case IH, New Holland, Claas, Valtra, Massey Fergusson, entre las que se cuelan algunas nacionales, como Pauny y Vassalli. Las cosechadoras promedian en precio, más o menos de acuerdo al tamaño, los $ 30.000.000; los tractores más de $ 7.000.000.
Massey Ferguson, empresa con 100 años en Argentina, presentó el 8.737 con todos los componentes argentinos -a excepción del motor Agco de 340 hp-: el tractor ‘argentino’ más grande y más potente. (En estas máquinas, los miles indican el tamaño del modelo: hasta el 3.000 son de uso en huertas; para arriba los de los campos agrícolas).
-Si bien en las maquinarias más grandes el mercado es dominado por las marcas extranjeras, Argentina está muy bien posicionada en dos rubros: sembradoras y pulverizadoras y, gracias a la experiencia de la siembra directa, los fabricantes argentinos exportan sus modelos al mundo, inclusive a Estados Unidos. Apache presentó el modelo 99.000, una sembradora dotada con motores eléctricos en cada uno de los cuerpos de siembra. Prácticamente un robot, aunque no viaje solo.
-La ganadería no es lo que atrae a Expoagro pero el sector fue creciendo en espacio y esta edición sumó con primera presencia a varias asociaciones de criadores: Angus, Hereford, Limousin, Braford -que hará el 8° Congreso Mundial en Argentina entre el 25 de mayo al domingo 6 de junio de 2022- y Shorthorn -que el año que viene festejará 200 años de la llegada de Tarquino, el primer toro de pedigrí en un campo argentino (dato: Tarquino junto al angus Virtuoso y al hereford Niágara ilustran la etiqueta del whisky Criadores. Pero el Shorthorn llegó primero, en 1823 a una estancia de Cañuelas).
-Lo más destacado de la ganadería fue la presentación de la raza argentina Seneford, producto del cruzamiento realizado en una cabaña santafesina entre la raza africana Senepol y la británica Hereford.
-Agrupadas en una carpa especial auspiciada por Microsoft Argentina se presentaron las compañías de tecnología digital orientadas al agro. Muchas son raras hasta en los nombres: Plataforma Puma, Sima, Auravant, Caburé, AgroPro, VetreV, Anylink, DVL, AgriRed, Agripay, Ucrop.it y Wiagro. Proveen servicios basados en inteligencia artificial, big data e internet de las cosas (IoT) para sistematizar y explorar todos los datos hectárea por hectárea que generan los softwares que equipan los ‘fierros’ y las imágenes satélites.
-La tecnología de protección de cultivos avanza hacia la elaboración de productos biológicos, los bioinsumos basados en el accionar de microorganismos vivos en reemplazo de las soluciones químicas. Varias empresas presentaron nuevos desarrollos como Rizobacter, pionera en Argentina -con asociaciones con laboratorios internacionales-, la alemana Helm, y las nacionales más jóvenes Proterguim, Ecofertilizing y Sigma.
-Como es de suponer estando Clarín y La Nación detrás de Expoagro, la convocatoria de visitantes ‘ilustres’ está garantizada. Durante los 4 días que duró la feria (1 malogrado por la lluvia) la flor y nata de la política agropecuaria acudió a la cita, con la sorpresa este año de una mayor presencia de kirchneristas, como el gobernador bonaerense Axel Kicillof y colaboradores, y del ministro de Interior Wado de Pedro, además de Julián Domínguez y funcionarios de Agricultura. De la oposición, la asistencia fue casi perfecta (Macri, Rodríguez Larreta, Bullrich, Negri, Vidal, Ritondo, Manes, Lopez Murphy, Losada, Tetáz, Lacunza y Milei, entre otros).
La participación de Domínguez y del secretario de Agricultura, Matías Lestani, resultó muy particular mirando con el retrovisor: ambos juraron que no iba a haber anuncios sobre exportaciones y que las retenciones no se tocaban. El viernes cerró la muestra y el domingo se anunció la suspensión de las ventas externas de harina y aceite de soja, seguramente para subir la alícuota de dex de 31% a 33%. Cuac.