La labor social que cumplen los clubes en los barrios y pueblos del interior es invaluable. Contienen, incentivan, promueven buenos hábitos y conductas, apoyan, acompañan, se vuelven familia.
Y eso es lo que se ha visto en el Rojo de Río Primero que este 15 de abril cumple sus 111 años y podrá celebrarlo disfrutando de un regalo millonario: un papá compró un equipo de riego automatizado, de 48 bocas, y con el apoyo de muchos anónimos más, se pudo hacer la instalación del moderno equipo de última generación.
Este sistema permite programar horarios y duración del riego, como así también determinar el volumen de agua y los sectores, pudiendo funcionar todas las bocas juntas o sólo algunas, cubriendo todo el campo de juego: "Es un hecho histórico, un sueño cumplido. Hoy podemos programar el sistema desde el teléfono para que se riegue solo. Esto es un lujo para el club", dijo agradecido el presidente de la entidad, César Tejeda.
La inversión estimada ronda los 4 millones de pesos, pero no tuvo que salir dinero del club para la adquisición del equipo sino que se logró gracias a la donación del papá de un niño que forma parte del club: "El club es una familia y tenemos que entenderlo así. Acá nos encontramos todos los días y hay mucho para hacer. Es con la suma de buenas intenciones que se pueden concretar grandes cosas, el aporte de todos es importante", sostuvo el presidente.
Tejeda compartió el próximo proyecto en el que trabajan: necesitan mejorar la iluminación del campo de juego y ya se han comenzado a sumar empresas y gente que tiene ganas de colaborar: "Estos impulsos le hacen mucho bien al club porque nos permite seguir creciendo para ofrecerle mejores condiciones a los chicos", afirmó.
En números
- El club Rivadavia nació el 15 de abril de 1912
- Ofrece seis disciplinas deportivas: fútbol, básquet, tenis, pádel, hockey y patín; además de actividades como: Ritmos, batería y guitarra.
- Más de 1.000 niños y jóvenes pasan a diario por la institución desarrollando diferentes actividades.