Lo que pasó
No podemos empezar hablando de algo que no sea el dólar, que desde el lunes mismo fue mostrando suba en sus cotizaciones y el jueves y viernes terminó de acelerar raudamente. El resultado final marca que en una semana la devaluación fue de prácticamente $ 2 (7/8%). Terminó operando en $ 29,20 para el segmento mayorista y alrededor de $ 29,70 para la plaza minorista. Si bien lo que terminó resonando fue la variación de casi un peso del día viernes, en las otras cuatro ruedas (de lunes a jueves), y sin tanto ruido, el tipo de cambio había acumulado la misma variación.
De factores o causas seguramente ya has leído miles de notas, desde acá lo simplificamos: internacionalmente el efecto Donald Trump sigue muy poderoso y golpea a los emergentes permanentemente (es Estados Unidos vs el mundo). Desde lo local, el cuadernogate arrastra a toda la actividad local, hace presuponer un aumento en el parate económico y una debilidad estructural cada vez más mayor que sobredimensiona la crisis global. Cayeron todos, desde Europa hasta Brasil, pero los más debilitados, como nuestro caso, lo sienten mucho más (ni hablar Turquía, blanco predilecto del presidente americano estos días).
El merval, no fue ajeno a toda esta crisis semanal y tuvo un recorte del 7,5%, mismos factores de los explicados en las líneas anteriores más los balances trimestrales de algunas empresas locales que empiezan a mostrar la desaceleración de la economía fundamentan la caída (a tener en cuenta, el día viernes y medido en pesos el Merval cerró positivo 0,3% sosteniéndose en un piso).
Y como siempre que se evidencian turbulencias cambiarias la receta de suba de tasas queda a la orden del día, las Lebacs con vencimiento pasado mañana terminaron operando por encima del 50% anual y toda la curva mostró subas:
Lo que viene: Nuestra clásica agenda de eventos