La era de las típicas grabaciones de robos o choques por las noches está llegando a su fin, al menos eso pretende Hikvision, con el lanzamiento de su nueva línea de videocámaras que captan imágenes a color en situaciones de poca luz.
A diferencia de las cámaras tradicionales, que suelen reemplazar los colores de las imágenes por blanco y negro -centrándose solamente en los componentes de brillo y contraste-, las ColorVu ofrecen una representación precisa del color y un excelente rendimiento en este tipo de entornos, además de una fácil instalación y compatibilidad con equipos.
¿Pero cómo es posible dar color en condiciones así?
La tecnología de ColorVu se basa en cinco aspectos:
- Un sensor de luz con reductor de ruido digital en 3D DNR, que ofrece imágenes mucho más nítidas.
- Apertura de diafragma F1.0, permitiendo la entrada de luz hasta cuatro veces más que un lente convencional, para una recuperación de los colores más natural.
- Mínima iluminación 0.0008lux, que permite visualizar las imágenes en situaciones de oscuridad.
- WDR de 120 dB, que mejora las situaciones de contraluz.
- Luz cálida complementaria, que se activa de manera automática o manual para aportar iluminación extra.
Respecto a esta nueva gama de cámaras, Lionel Rypinski, Channel Sales manager de Hikvision Argentina señala que: “Esta nueva serie de dispositivos fue pensada como una alternativa a las cámaras tradicionales que trabajan con infrarrojos, impidiendo la identificación detallada de las personas, vehículos o cualquier otro elemento importante. Dado que no operan con focos LED, que suelen desgastarse y quemarse con el uso frecuente, las cámaras ColorVu cuentan con una iluminación complementaria suave y cálida para garantizar imágenes coloridas y un sensor avanzado que mejora el uso de la luz disponible”.