Con el caso Vitnik aún caliente, los cordobeses nos desayunamos ayer con la noticia de otros empresarios detenidos, involucrados en una mega causa de contrabando. Se trata de la empresa Julia Saúl, cuya propietaria, Patricia Rudminsky, fue detenida junto con otras 4 personas, pertenecientes a la firma, acusados por supuesto contrabando de productos electrónicos.
El operativo se llevó a cabo a raíz de una investigación de la Aduana y la Fiscalía Federal N° 2 de la ciudad de Córdoba, en el que se secuestró mercadería por más de US$ 2 millones. Si bien los locales de la firma no fueron clausurados, toda la mercadería fue secuestrada, por lo que les será muy difícil continuar con la comercialización.
Anoche, la Justicia decidía la suerte de los detenidos, que serían alojados en Bower. En tanto, los abogados defensores se reunían para definir la estrategia a seguir, que seguramente incluirá como primera medida solicitar la excarcelación de sus defendidos.
De corroborarse su culpabilidad, los empresarios podrían pasar entre 4 y 10 años en prisión.
En total, la Justicia Federal de Córdoba libró siete órdenes de detención (hay dos personas prófugas).
Con los Rudminsky, más empresarios “alojados” en Bower (el caso Julia Saúl)
Al cierre de esta edición, la cárcel en Bower recibía a los primeros detenidos en la causa Julia Saúl, que permanecieron durante todo el día de ayer en la alcaldía del Juzgado Federal N° 2, a cargo Alejandro Sánchez Freytes, tras los allanamientos realizados en el marco de una investigación llevada a cabo por la Aduana.
El primero en llegar a Bower fue Roberto Rudminsky, uno de los accionistas de la firma, detenido junto a Berta Barenboim (también accionista), dos empleados jerárquicos y la ceo y cara visible de la empresa, Patricia Rudminsky (foto). Los empresarios serán defendidos por el abogado Benjamín Sonzini Astudillo, quien solicitará la excarcelación.