Los números del Sanatorio Allende (sumando sus dos sedes, Nueva Córdoba y Cerro) son tremendos: en sus instalaciones nacieron más de 4.000 niños el año pasado y se realizaron más de 1.100.000 consultas en sus decenas de especialidades.
Ayer, en la presentación de la última etapa de la obra de la sede Cerro, los directivos del Allende mostraron la nuevas habitaciones que suman 184 camas, incluyendo 97 en sala común (40 camas en habitación individual), 15 en UTI, 14 en unidad coronaria, 22 en neonatología, entre otras.
Con esta oferta de hotelería (en la jerga hospitalaria también se habla de hotelería), el Allende supera las 400 camas entre sus dos sedes, una oferta que supera a las de Sheraton (tiene 378 plazas, contando las camas doble por dos) y Holiday Inn (284 plazas).
De hecho, para la administración del área, ambas instituciones tienen su gerente de hotelería: uno proveniente del sector hotelero y otra del sector médico que aprendió el oficio.
En los retoques finales a la última etapa de la obra se incluye una reformulación completa del bar de planta baja, donde está trabajando el equipo de Javier Rodríguez (El Papagayo, Standard 69), según contaron ayer en la recorrida por las nuevas habitaciones y espacios.
Zona sur, un proyecto a 20 años
Además de estas dos sedes, el Allende también planea un nuevo centro en la zona sur de la ciudad, en el predio de Manantiales de Grupo Edisur.
“El proyecto del Cerro nos llevó 8 años de punta a punta, pero estimamos que el nuevo desafío -que es mucho más grande- nos demandará 20 años en total”, explican.
Y como el Sanatorio Allende está celebrando sus 80 años, si los plazos se cumplen, el último corte de cintas de las etapas que tendrá la nueva sede se dará en 2038, justo cuando estén celebrando el primer siglo de la institución.