Córdoba mejora su distribución del ingreso y Rosario la empeora mal (Mendoza, la mejor)
Decir que Argentina es una país marcadamente desigual no es precisamente una primicia. Pero mostrar cómo evoluciona la distribución del ingreso en el país es un ejercicio interesante al que nos ayuda notablemente el último trabajo del Iaraf que dirige Nadin Argañaraz y donde podemos ver que:
- El primer decil (el 10% de la población más pobre) sólo recibe el 1% del ingreso familiar, mientras que en la otra punta de la pirámide -el decil más alto- se lleva entre el 30% (Mendoza) y hasta el 35% (Capital Federal) del ingreso. Esa es la foto.
- Pero si ponemos “play” y vemos la película, entre el 2006 y el 2009 el decil más pobre tuvo un crecimiento del 106% de sus ingresos, mientras que el más rico de sólo el 75%, lo que contribuyó a achicar la brecha en Córdoba.
- Muy por el contrario, en Rosario el decil más pobre sólo mejoró 77% sus ingresos en ese período, mientras los ricos se hacían más ricos: 102% de mejora en el ingreso familiar del decil más acomodado.
- Gran Buenos Aires muestra cierta tendencia también a cerrar la brecha, mientras que Mendoza es un excelente ejemplo de redistribución del ingreso: los más pobres ganan (y reciben) el 132% más, contra un 56% de mejora en el decil superior (ver cuadro de página 7 en el informe del Iaraf).
- Finalmente, el coeficiente de Gini que también se utiliza para medir distribución del ingreso muestra que aunque entre el 2001 y el 2009 mejoró este indicador en los 4 centros urbanos, sólo Mendoza mantiene la curva positiva y el resto de los conglomerados muestra un retroceso en el último año.