Javier Milei sostiene que la política argentina se debe una reconfiguración distinta al colectivismo de buenos y malos modales. Para él hay que realinear a quienes piensan que el Estado debe organizar la vida nacional y quienes apuestan a que sea la iniciativa privada la que marque el ritmo en función de una lógica de costo-beneficio.
Y eso exactamente sucederá en 4 semanas, el domingo 19 de noviembre: la gente deberá votar por lo malo conocido y una propuesta que a muchos mete miedo.
Fue precisamente un pensador de izquierdas -Erich Fromm- quien definió en El Miedo a la Libertad por qué los seres humanos a menudo se resisten a la verdadera libertad.
Fromm invierte la perspectiva convencional y argumenta que el temor al cambio y al desconocido no es la razón por la cual la mayoría de nosotros no tenemos una verdadera libertad. Para este psicoanalista nacido en 1900 el miedo a la libertad surge de una necesidad de control y pertenencia.
Es muy posible que el balotaje tenga números finales “para alquilar balcones”: 47 a 53, 48 a 52 o incluso 49 a 51. Y -por qué no- las dos opciones con 49 y pico cada uno.
Juguemos con los números: los pisos de cada candidato están puestos. Los 36 de Massa deberían sumar los casi 3 de Bregman y posiblemente 3 ó 4 puntos de Schiaretti. Bastarían 8 puntos de los 24 de Bullrich para que Massa esté en la mitad del electorado.
Para Milei, los puntos necesarios tienen casi una única vertiente: los votantes de JxC o -mejor dicho- de Bullrich, porque seguramente los de Larreta ya se fueron con Massa este domingo.
Ojo: los 600.000 votos de Schiaretti en Córdoba deberían pasar a Milei a razón de 9 a 1, pero el cordobés sacó además otro millón de votantes de componente más peronista. Habrá que ver.
Hábil tejedor de alianzas, nadie debería “dar por pobre” a Massa. Seguirá sacando conejos de la vieja chistera estas cuatro semanas y peleará cada voto con ortodoxia y -sobre todo- mucha heterodoxia discursiva y práctica.
Tampoco la tiene fácil el hombre de Tigre: deberá hacer malabarismos con el tipo de cambio, la inflación, la corrida bancaria y un potencial desabastecimiento de bienes si se suben los controles a precios.
Clap, clap a AtlasIntel
No es verdad que le erraron las encuestas. AtlasIntel dio una pista de qué estaba pasando aunque los medios no le hicieron mucho eco. Pronosticó que ganaba Massa (con menos puntos), pero en exacto orden y distancia con Milei y Bullrich.
Todos somos “Chocolate”
Un puntero operando con decenas de tarjetas de ñoquis y un intendente en un yate millonario lejos de esmerilar la performance de Kicillof, pareciera que lo potenciaron. En La República del GBA (parafraseando a Schiaretti) no habría balotaje y UxP habría ganado en primera vuelta.
34 diputados y 6 senadores
Con los datos provisorios, el bloque de La Libertad Avanza en Diputados (hoy solo Milei - Villarruel) suma 34 diputados en el Congreso (que se suman a los 3 que ya tenían) y 6 Senadores (1 por Formosa y 1 por La Rioja y 2 por San Juan más 2 por San Luis).
Macri podría ser la llave de Milei
Un acuerdo entre el macrismo y Milei que incluyera cuadros y ministros para un eventual gobierno podría ser el barniz de gobernabilidad que le falta al libertario.
Qué harán los Lilitos
De acá a noviembre queda un espacio de dificil equilibrio para personas que transitan en el colectivismo de buenos modales: Elisa Carrió, Gerardo Morales e incluso los cordobeses Mario Negri y Rodrigo de Loredo, por no mencionar al siempre inclasificable Luis Juez.