Los cigarrillos electrónicos buscan un socio para llegar a Córdoba (¿existe “fumar sano”?)
Los cigarrillos electrónicos pueden ser la alternativa que úna dos imposibles: cumplir el ritual de que fumar es un placer (como dice el tango) pero sin afectar la salud propia ni de terceros.
Esa es -al menos- la propuesta de valor de los Cigarrillos Electrónicos Winged que ya llegaron a la Ciudad de Buenos Aires, Mendoza y San Luis y ahora están buscando su representante en Córdoba.
“Ya cerramos acuerdos para Rosario y Santa Fe, pronto habrá novedades en Córdoba”, adelanta Gastón D’Orsi, gerente de marketing de la empresa.
Precedidos de comentarios diversos a favor y en contra, estos cigarrillos “no son inflamables, por lo que no es necesario encenderlos, se impulsan gracias a una pequeña batería recargable y un único cartucho reemplazable que contiene agua (lo que hace que se libere vapor que simula ser humo al exhalar), propylene lycol, nicotina, y un sabor que simula el aroma a tabaco”, explica D´Orsi.
Según sus impulsores, “ninguno de estos ingredientes son considerados agentes causantes del cáncer”, lo que los hace “inofensivos”. ¿Precios? El kit de Cigarrillos Electrónicos Winged -que contiene la batería, atomizador, cartucho (donde se encuentra el líquido), la caja de plástico (que simula ser una etiqueta) con batería interna y 5 cartuchos de repuesto- oscila entre los $ 250 y $ 400 dependiendo del modelo. Y “duran” el equivalente a 60 ó 120 cigarrillos, dependiendo también del modelo elegido.