Sábado, viernes, domingo, jueves, miércoles, martes y lunes. Así se ordena -en facturación de mayor a menor- la semana de un gastronómico, explican desde Maxirest, el software de gestión (back y front end) que utiliza el 50% de los establecimientos en el país.
Con 7.600 locales corriendo algunas de sus soluciones, Maxirest procesa más de 500.000 tickets diarios que -en promedio- implican un consumo de $ 18.200 cada uno, en una amplia dispersión de precios (“Hemos visto tickets con una empanada de $ 8.000 la unidad”, explican sobre la diversidad de valores y servicios del sector).
La modalidad de consumo indica que el 52,4% de las ventas son realizadas en modalidad de salón, seguida por el 40,2% en servicios de delivery, y el 7,4% restante a través de mostrador o take away.
Con 28 años al frente de Maxirest, Aldo Pecile entiende cada punto de dolor de un establecimiento gastronómico y fue desarrollando un kit de soluciones SaaS (software en alquiler mensual) que inician en menos de $ 10.000 por mes.
“Durante todo el primer semestre vimos caídas del 30% en la cantidad de tickets y recién ahora los números empiezan a emparejarse en la comparación interanual”, analizan desde la empresa que emplea a 180 personas, 40 exclusivamente dedicados a desarrollos IT.
Además de Argentina, Maxirest está presente en Uruguay y Paraguay y prontos al desembarco en Perú con sus soluciones todo terreno que permiten desde tomar el pedido en la mesa con un PDA o teléfono móvil, a llevar la administración de compras y suministros de un local gastronómicos.
-¿Están listos para lidiar con las propinas en pagos digitales?
-100% listos. Cambia ahora que el restaurante no tributará por ese adicional y que están obligados a recibir ese pago electrónico si el cliente lo requiere. De todas formas -por lo que vemos- el mozo seguirá prefiriendo la propina en efectivo. Veremos si se da el cambio cultural, que ese sí es dificil.