La historia de Procens es mucho más que moscas y larvas. Para poder comprender el espíritu de este proyecto, que propone generar grandes cambios, es necesario conocer a sus fundadores: el belga François Nolet y el francés Julien Laurençon.
Julien, cansado de trabajar durante más de 15 años para más de 10 bancos en Europa y Asia, decidió cambiar el rumbo de su vida luego de un retiro en Bali. A partir de ese momento, comenzó un viaje por 18 países diferentes, en el cual descubrió Argentina sin saber el idioma, pero completamente fascinado con nuestro país. En medio de esta nueva etapa comenzó a trabajar para diferentes ONGs y, además, conoció a su futuro socio: François.
El joven ingeniero industrial de origen belga, inspirado por el concepto de “economía azul” de Gunter Pauli comenzó a desarrollar un gran interés por los modelos económicos sistémicos, los cuales contribuyen a la recuperación de los ecosistemas. Luego de haber desarrollado en Bélgica un emprendimiento de cultivo de hongos sobre borra de café, decidió instalarse en el país para colaborar en diversos proyectos productivos.
La iniciativa de la producción de gírgolas fue trasladada a Argentina, en la cual también participó Julien, pero llegaron a un momento en el cual debieron destinar todas sus energías a Procens.
Estos emprendedores instalados en Colonia Caroya situaron su primer biofábrica en una finca agroecológica para desarrollar la primera fase de este proyecto con el cual pueden transformar en 14 días una tonelada de residuos orgánicos en 75 kg de harina proteica, 23 kg de aceite y 400 kg de abono.
EcoEmprendedores: Procens¡Transformar la basura orgánica en proteínas es posible! ? A través de un proceso controlado de cría de insectos a escala industrial, Julien junto a Francois de Procens, logran obtener alimento proteico para los animales y abono orgánico. ???????? En el mes del ambiente ????, estos amigos que llegaron a Córdoba desde Bélgica y Singapur, nos detallan cómo es este novedoso emprendimiento. #EcoEmprendedores #MesDelAmbiente #MiAmbienteMiCompromiso
Publicado por Secretaría de Ambiente de Córdoba en Jueves, 11 de junio de 2020
Las larvas en acción
Para poder desarrollar este emprendimiento necesitan de sus protagonistas: las moscas soldados negras, las cuales para sorpresa de Julien y François no estaban registradas dentro de las especies de insectos del país. Estas moscas, originarias de América, viven unos 10 días. Durante ese tiempo únicamente se alimentan de líquidos y se reproducen. Sus huevos a los dos días eclosionan en larvas que se encargan de degradar el material y multiplican por 4000 su peso durante el proceso.
El 98% de las larvas son destinadas a la producción de una harina altamente proteica y sus coproductos: aceite y abono natural.
Procens, un emprendimiento que promete mucho
Los beneficios son múltiples, dentro de los cuales se destacan:
- un proceso con cero emisiones y residuos;
- la reducción de la contaminación ambiental proveniente de los municipios y la agroindustria;
- la posibilidad de sustituir la harina de pescado o el cultivo de soja para alimentar a los animales;
- la utilización de un abono natural que contribuye a cuidar los suelos.
François destaca sobre este último punto el hecho de que numerosas veces “a los agricultores se les exige alimentos más naturales”, pero la realidad es que no existen muchas alternativas para realizar un gran cambio. Por su parte, Procens propone una solución alejada de los fertilizantes químicos.
Asimismo, Julien no descarta la posibilidad de que la harina de insectos pueda ser consumida por personas ya que “una vez superada la barrera psicológica te das cuenta que es un gran alimento con más del 50% de proteína”.
El proyecto fue seleccionado para formar parte de IncubaCor y del programa de Mayma junto con Mercado Libre, en el cual quedaron seleccionados entre los 6 finalistas del país. Por su parte, Julien afirma que “es importante dar a conocer estos programas” ya que los apoyaron a comenzar el proyecto y, a su vez, señala con gran entusiasmo la relevancia de sus inversores ángeles quienes decidieron formar parte del desarrollo de esta nueva industria basada en insectos.