Proponen un impuesto a la herencia (yo estoy de acuerdo)
Siempre he pensado que en esto de “la lucha contra la desigualdad” hay más retórica que ideas prácticas y decisión política.
Y que la ley de herencia en la Argentina es anacrónica: no sólo impide virtualmente disponer de la propia fortuna, sino que la eterniza -generación tras generación- de una manera poco productiva.
En duras discusiones de sobremesa he defendido frente a amigos “ricachones” un fuerte impuesto a la herencia.
Por eso me congratuló leer en Fortuna que Iván Werning -un joven argentino considerado en el mundo académico como uno de los teóricos en economía más prometedores- sostiene que “un impuesto a la herencia reduce las desigualdades”. (Ver artículo completo aquí).
Espero no hacerme demasiado viejo antes que nuestro bendito país se siente a discutir una nueva ley federal de impuestos que -además de cumplir con la Constitución- nos reorganice tras el bicentenario. Menos IVA, más Ganancias (en contribuyentes, no en alícuota), menos Retenciones y un fuerte impuesto a la herencia (todos coparticipables), podrían ser un mix interesante de cara a los próximos 100 años de la Argentina.