“Somos chicos, pero no débiles”, es la definición exacta que Horacio Parodi (foto) tiene para el banco que preside. Aunque está entre los puestos 60 a 65 entre los 80 bancos del sistema, el Roela brilla en sus indicadores de solvencia y liquidez.
Si bien tiene todos los productos de un banco generalista, Roela siempre aplicó una estrategia “mono-producto”: durante mucho tiempo se dedicaron a créditos hipotecarios (entregaron 20.000 en su historia) y ahora hacen hincapié en SIRO, su sistema de recaudación que ya suma 7.000 clientes entre administradores de consorcios, colegios y distintas instituciones que buscan una solución para el cobro de sus cuotas.
La propuesta es simplificar las cosas a estas instituciones que con SIRO pueden integrar cadenas de cobro como Rapipago y Pago Fácil (además de la red Bapro) y ventanillas electrónicas como Pago Mis Cuentas y Link Pagos. La entidad recibe cada día un resumen de lo que ingresó y obtiene un trato diferente por un servicio que a los otros bancos no les interesa.
Para 2015 realizarán con SIRO 3 millones de transacciones, intermediando $ 3.000 millones, una cifra que esperan llevar a $ 5.000 millones en año próximo.
Aunque sólo tienen sucursales en Córdoba (3) y Buenos Aires (1), SIRO se comercializa en varias ciudades como Tucumán, La Plata y Rosario y ya genera el 20% de las utilidades del Roela, con una perspectiva de fuerte crecimiento.
La gente de Banco Roela estima que hoy tienen un 40% del market share del mercado con SIRO en Córdoba y un importante 7% en Buenos Aires donde aspiran a triplicar su participación en los próximos años.
Esperando el regreso de los hipotecarios
Aunque con SIRO les está yendo muy bien, desde el Roela esperan que con el nuevo gobierno (y tras un 2016 de reacomodamiento de la economía) en 2017 vuelvan los créditos hipotecarios que imaginan con apoyo del sector público: lo ideal sería que se establezca (vía Presupuesto Nacional) un aporte para lograr tasas fijas que despejen la incertidumbre de los tomadores, analizan desde el Roela.