AMHE es una joyería de diseño con productos elaborados 100% a mano, donde Laura, Carolina y Marisa trabajan en conjunto y donde confluyen el bagaje que cada una trae de sus respectivas disciplinas profesionales. Mezclando conocimientos de arquitectura, comunicación y cultura, ellas intervienen cada diseño que previamente maquetean para luego poder terminar cada una de las joyas.
Cada diseño es único y cada una tiene su propio estilo. Sin embargo, desde el principio siempre dejaron las cosas en claro: “AMHE más que una marca es un concepto, es decir, tengo un AMHE, tengo una joya AMHE, un producto que hoy es una joya y mañana puede ser otra cosa” comentó Laura.
La marca trae una multidisciplinariedad de fondo, un acervo de ideas que se ponen arriba de la mesa a la hora de pensar los productos y la idea de resignificar el concepto de lo que es el lujo a partir de la creación de piezas que sigan la línea del brutalismo. ¿Qué significa esto? Son piezas que presentan grandes espesores, piedras en bruto, grandes dimensiones y se juega mucho con la resignificación de objetos.
“Salimos a buscar elementos a ferreterías, a lugares super perdidos. Uno de los productos más vendidos que tenemos, que tiene una cadena distintiva, la conseguimos en una ferretería perdida. Es una cadena que no se consigue más porque la fábrica ya no la produce”, expresó Laura.
¿Qué productos puedo encontrar? Desde aros hasta collares, hay una gran variedad de piezas con intervenciones diferentes. La pieza llamada columna vertebral, es la más popular y por la que el público pregunta siempre, con un precio de $ 145.000, qué es la pieza más cara que poseen. Y por otro lado, la pieza más vendida, es el collar Regia bañado en oro, con un precio de $ 27.500. Cada pieza AMHE varía su precio según el material utilizado, la dimensión de la pieza y si es con baño en oro o en plata.
“No somos una marca de moda, no seguimos estaciones, no tenemos colecciones por estaciones, sino que nos gusta más la idea de construir un estilo personal diferente. Queremos que nuestras joyas acompañen a las personas que las utilizan pero no por una cuestión de moda”, agregó Carolina.
Como todo emprendimiento, AMHE arrancó con el boca en boca de familia y amigos. La gran sorpresa que tuvieron estas 3 emprendedoras fue que si bien comenzaron el proyecto apuntando a un público exterior, el primer punto de ventas se situó en la provincia de Córdoba. El próximo punto de venta que la marca vislumbra para asentarse es en la provincia de Buenos Aires, para luego ir apuntando hacia otros horizontes.
“Nos sorprendió muchísimo Córdoba, porque si bien nosotras estamos muy seguras de nuestro producto y lo amamos, hay una necesidad de las personas de algo distinto y por eso fue que nos llamó la atención” comentó Marisa.