En busca de democratizar la energía, desde 2016, Ecovatio ha crecido exponencialmente gracias no solo a la concientización sobre las energías verdes, sino por la rápida evolución de estas fuentes, sobre todo la fotovoltaica con “usinas” cada vez más pequeñas y eficientes para uso doméstico y empresarial.
Es así que, de la mano de su relación como Partner Oficial con la austriaca Fronius (la “Apple” de los inversores fotovoltáicos) es que acaban de realizar las instalaciones 40 y 41 a nivel mundial de su nuevo inversor Tauro Eco de 100 y 50 kw, que vieron la luz a principios de este año y ya están trabajando en la fábrica de Denso Manufacturing (fabricante de Toyota) y en la estación de servicio Shell del grupo Guisi, en Av. Colón y Zípoli.
Pero antes de seguir ¿qué es un inversor?
Se trata de la “CPU” de toda usina solar, que convierte la corriente continua que recibe de los paneles a corriente alterna, tal cual circula en cualquier instalación eléctrica y a su vez se encarga de regular y gestionar la captación de energía en base a si queremos enviar el excedente a la red o si preferimos almacenarla en baterías para un uso posterior.
Así es que estos nuevos inversores Tauro Eco son un salto cualitativo en cuanto a inversores, ya que permiten un alto rendimiento en sistemas descentralizados, si no una mejor gestión de la energía y al ser equipos robustos pueden ser instalados en la intemperie sin problemas, sin necesidad de obras complementarias para cuidar a los equipos, suponiendo un ahorro del 15% en la instalación de estos sistemas.