Mi viejo me contó de Badessich y –décadas antes de la Internet- le llevó un buen rato encontrar la edición de Todo es Historia donde se cronicaban las andanzas del “diputado bromosódico”, el particular personaje que fue electo por el pueblo de Córdoba en 1922, como forma de protesta y reacción frente a los resabios de la aristocracia y el clericalismo que dominaban la provincia.
Con ese material parcial fui a proponerle a mi jefe del diario Córdoba (el ahora también mítico Negro Reyna) una nota sobre el tema. Nada había en los archivos del edificio de calle Tablada y General Paz, así que tenía que ir a dónde íbamos todos los periodistas pre-Google: a hablar con Efraín Bischoff en su casa de Alta Córdoba.
Allí me nutrí de material y de anécdotas que volqué en una contratapa. De nada de eso hay registro hoy en el mundo digital. Sí recuerdo que en su campaña electoral, Badessich vestía trajes hechos de papel (¡imaginate la osadía en 1920!) y sus propuestas se mofaban de los apellidos ilustres y los cléricos de Córdoba.
Formó partido, sí. Y obtuvo los votos para ingresar a la Cámara local, cosa que nunca consiguió porque a sus propuestas en favor del amor libre, entre otras cosas, no les había llegado la hora.
No lo dejaron asumir, aunque –dice ahora sí algún artículo en Internet- que José Ingenieros y otros intelectuales saludaron su elección como un gesto de rebelión a un sistema esclerosado.
Me había olvidado de todo esto hasta que ayer (se sabe, ayer es hoy para los periodistas gráficos), me llegó una gacetilla muy bien hecha donde FWTV, el primer canal de Web TV de Latinoamérica, impulsa la humorada al siguiente nivel: ya tiene su propio y creciente espacio en las redes y empezó a deambular por programas televisivos varios o en las redes sociales y visita cada día un nuevo programa de TV.
Traer de vuelta a Messi, ponerle fecha de vencimiento a la Libreta de Matrimonio y asfaltar el Riachuelo son algunas de las propuestas de Obaca, cuyo claim de campaña incita: #VotaEnNegro.
No me extrañaría en nada que –si alguien impulsara la formalización de este gran chiste- Omar Obaca obtuviera más votos que varios candidatos “serios”.
Ya lo hizo Badessich hace casi 100 años. Para novedades, nada como los clásicos.
Omar Obaca Presidente, un chiste que puede terminar en algo más
Muerto el gran Efraín U. Bischoff, pocos se acuerdan de Enrique Badessich, el libertario anticlerical ungido diputado en Córdoba en 1922, casi como chiste y que proponía recortar la sotana de los curas para abrigar a los pobres. La candidatura de Omar Obaca (¡No te pierdas los videos!) –parece- va en una senda similar: conquistar a los desencantados de todo, incluso (y peligrosamente) del sistema democrático. Detalles del pasado que vuelve.