En 2010 la vida de Miriam Nujimovich dio un giro inesperado. Un ACV la obligó a reaprender a hablar, caminar y escribir. Sin embargo, lejos de convertirse en un obstáculo, el accidente le dio el empuje necesario para armar un negocio que, más que ofrecer un producto, es una suerte de servicio para las personas.
Handy Inclusiva, una marca que nació hace cuatro años, se especializa en la producción y comercialización de ropa especial para discapacitados o personas con movilidad reducida. Talles grandes, costuras chatas, géneros especiales y cortes con funcionalidad, otorgan a quien usa un Handy mayor grado de autonomía y comodidad, fusionando diseño, moda y estilo.
“Arranqué con una modista adaptando mi propia ropa porque un brazo me quedó inmóvil. Más tarde, pensé en expandir esta propuesta para otras personas que necesiten algún tipo de prenda especial”, comenta Nujimovich, creadora de Handy Inclusiva.
Si bien la marca posee sede en la provincia de Buenos Aires, con un showroom en Belgrano, se realizan envíos a todo el país. “La prioridad de este negocio es que los productos lleguen a todos los que lo necesitan. Es por ello que los precios son accesibles y que, más allá de dónde viva la persona, si lo desea, pueda tener un Handy en su casa”, apunta Nujimovich.
Las prendas Handy se consideran inclusivas, no solo porque son para todas las edades (niños, adolescentes y adultos), sino además porque son pensadas para hacer más fácil el momento de vestir y desvestir, otorgando practicidad y autonomía: “En el taller, los géneros se cortan distintos a los convencionales, y las prendas, además de poseer velcros, cierres y otras características, tienen muchas diferencias que no se ven, como son los hilos, costuras chatas para no producir escaras, entre otras”, detalla la titular de Handy.
Actualmente, son 18 las prendas que la marca ofrece: pantalones, remeras, buzos y mantas, entre otras. Asimismo, Nujimovich adelanta que incorporará ropa interior: “Es algo que estamos aún trabajando y que me piden mucho los clientes. Creemos que este nuevo ingreso va a ser un boom”.
Más allá de lo que la marca resulta como negocio, Nujimovich tiene el ojo puesto en el servicio que otorga a sus clientes. Handy Inclusiva pretende desmitificar el pensamiento de la frivolidad de la moda, combinando funcionalidad, estilo y diseño con autodeterminación y compromiso: “Quienes usan la marca me comentan que no solo les facilita el momento de vestir y desvestirse, sino que muchos han logrado salir de sus casas gracias a nosotros y elevar su autoestima. El saber que estoy ayudando a mejorar la calidad de vida de una persona me llena de felicidad”, concluye Nujimovich.