"... el fuerte incremento de la oferta monetaria, la bomba de los pasivos remunerados del BCRA, la caída de la demanda de dinero y una caída colosal del nivel de actividad económica fruto de la cuarentena, esto se llama hiperinflación a la vista".
Ese es el análisis del polémico y rimbombante economista liberal Javier Milei en una conceptual nota en El Cronista (El misterio de la inflación... ¿misterio?) donde aborda por qué los precios no venían subiendo en marzo, abril y mayo en concordancia con la fenomenal emisión monetaria.
La inflación minorista de junio ya prendió una luz amarilla: 2,2% en junio. Este jueves el Indec mostró el Índice de Precios Mayoristas que muestra un aumento del 3,7%, como consecuencia de la suba de 3,8% en los “Productos nacionales” y de 2,6% en los “Productos importados”.
Para Milei, el peligro de una "hiper" estará si el gobierno nacional intenta un plan "keynesiano" de reactivación de la economía con obra pública y advierte: "la tasa de crecimiento monetario produce un cambio en el ingreso nominal entre 6 y 9 meses más tarde".