Monsanto lanza la décima edición del programa Semillero de Futuro (suma UY, PY, CL y BR)

Semillero de Futuro es el programa de Responsabilidad Social de Monsanto, creado para colaborar con aquellas organizaciones sin fines de lucro que contribuyen a la alimentación y nutrición de las comunidades de Argentina. En esta edición 2016 se incorpora al programa a comunidades de Uruguay, Paraguay, Chile y Brasil.

Durante los 9 años que lleva en la Argentina este programa, se destinaron más de 17 millones de pesos a 420 proyectos sociales sustentables de 259 organizaciones en 16 provincias argentinas, beneficiando a más de 100.000 personas de nuestro país.

Aquellas organizaciones que quieran participar para ser beneficiarias del programa Semillero de Futuro 2016 podrán presentar sus ideas a través de proyectos relacionados con huertas productivas, comedores comunitarios, nutrición y alimentación y seguimientos nutricionales, especialmente aquellos que beneficien a madres y niños de 0 a 5 años.

Por medio de un comité evaluador se seleccionarán los proyectos beneficiarios en una primera instancia. Cada uno de ellos tendrá la posibilidad de ampliar su iniciativa o de presentar una nueva para pasar a una segunda etapa de votación, donde se seleccionarán tres proyectos finalistas. En esa etapa final, se invitará a la comunidad a votar a través de la web para elegir entre los tres proyectos finalistas. La iniciativa que obtenga mayor cantidad de votos será quien reciba mayor apoyo económico.

El Programa de Responsabilidad Social de Monsanto “Semillero de Futuro 2016” es financiado por la Fundación Monsanto, con el objetivo de mejorar significativamente la calidad de vida de las comunidades rurales, ofreciendo un apoyo financiero sustentable en aquellas regiones en las que Monsanto tiene actividad.

YPF reconfigura el mapa energético del NOA con dos movimientos clave

YPF dio dos pasos estratégicos que redefinen el escenario energético y productivo del Noroeste Argentino. La adquisición del 100% de Refinor y el anuncio de la reactivación de una planta para biocombustibles en Salta marcan una apuesta integral por la región, con impacto directo en el mercado de combustibles y en la industria sucroalcoholera.