Tal y como se preveía, el Gobierno extendió el plan de subsidios a la compra de autos nuevos, un pedido de los concesionarios y las automotrices. Si bien los datos de ventas de junio no fueron muy alentadores, desde los concesionarios mostraron que si se toman en cuenta solo los autos vendidos en forma directa (sin planes de ahorro), resultó bastante bien.
A decir, verdad, el Gobierno lo único que hará será extender el plazo para usar el fondo que dispuso para la iniciativa, teniendo en cuenta que no se había usado todo. A esto hay que sumarle que el gobierno de Córdoba, al igual que otros distritos, se sumó con una suspensión del impuesto a los sellos (ver detalles).
Los subsidios estatales son de $ 50.000 para aquellos autos cuyo precio de venta sea igual o inferior a $ 750.000; y de $ 90.000 para aquellos cuyo precio sea superior, a lo que cada marca puede agregar el beneficio que quiera. El límite superior son los autos que pagan impuestos internos, alrededor de $ 2.140.000 de precio de venta al público. No se incluyen vehículos utilitarios como camionetas.
Más detalles en Cars Drive.