El Mustang en cuestión no es una serie demasiado vista, de la primera generación del modelo, aunque con diversos cambios respecto al de 1964. Lo raro es que se trata de la poco vista carrocería Hard Top, es decir que no cuenta con la más afamada silueta Fastback, que lo hacía ver mucho más estilizado. En este caso la caída del techo es un poco más abrupta, y si se quiere, menos deportiva.
El frontal era la característica más notoria de este Mustang, que contaba con ópticas circulares, precedidas por un par de tomas de aire hacia los laterales. La unidad en particular fue pintada en color negro mate, y rematada con llantas de estilo moderno, que no terminan de encuadrar del todo bien con el diseño del auto.
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