Diego Jesús Pampiglione, más conocido en su Instagram como “Raúl Sencillez”, es músico, cantante, compositor argentino, miembro fundador y baterista de la banda Los Caligaris. Se crió hasta los 6 años en un circo donde trabajaba su familia y de ahí dice que se desprende su noción artística. Trabaja con la banda, viaja, compone, es padre: convive con muchas cosas a la vez.
InfoNegocios: ¿Cómo decidiste mostrar tu trabajo en Instragram y que la red sea tu empresa?
Raul Sencillez: Armé mi Instagram y otras redes sociales para estar presente, mostrar lo que hago, lógicamente uno no se puede quedar afuera del circuito. El hecho de estar en la banda y hacer otras cosas a la vez, genera una serie de contactos y llegada al público distinto. Nosotros empezamos en 2002 con Los Caligaris, en ese momento no había redes ni nada y con el tiempo fuimos aprendiendo distintas formas de comunicarnos: utilizamos Instagram, Youtube y Facebook para comunicarnos con nuestro público.
Me parece que hay que ir aggiornandose a lo nuevo, a lo que surge. Por ejemplo, los pibitos que hoy tienen 20 años, que lideran el rubro de la música, llegaron para cambiar muchas cuestiones y si uno no se aggiorna a eso, se queda atrás.
En el Instagram de la banda tenemos aproximadamente 400.000 seguidores, un número grande comparándonos con otras, nos va muy bien en Facebook y Youtube.
IN: ¿Hacen fusiones a partir de estas nuevas creaciones de la música de gente joven? ¿Les gusta complementarse?
RS: Particularmente suelo pedir consejos y conceptos a otros artistas, porque sirve estar a la vanguardia. Ahora nos juntamos con Paulo Londra y con Kodigo (cantante de freestyle) para encarrilar algo juntos. Creo que las redes sociales te dan esa posibilidad de estar, después depende del contenido que uno produce, si es bueno o más o menos. Al comienzo de la banda, yo estudiaba periodismo y el comunicador se daba en otro contexto, era el que estaba solamente en la radio o en televisión. Hoy aparecen los tik tokers, los gamers, los que hacen Twitch, vivos por Facebook, etc.
IN: Y tu perfil, Raúl Sencillez, ¿cómo lo llevas? Aparte de la banda…
RS: Yo tengo 89.000 seguidores. Antes de las redes sociales yo daba mi número de whatsapp, conocía a alguien y automáticamente se lo pasaba. Claramente tuve que cambiarlo porque me explotaba el teléfono, hoy creo que las redes filtran un poco eso. Me encantaría tener alguien que me maneje la redes para poder subir contenido todos los días, es como un objetivo tener a alguien que me oriente, que me ordene. Para contestar mensajes también, yo no contesto todos, por ahí me escriben y no los veo. A mí me dicen Raul Sencillez porque doy un personaje sencillo, amigo y si no contesto no va con ese estilo o personaje que trato de mantener, realmente me gustaría poder responderles a todos.
IN: Tenes tu perfil artístico, tu perfil personal, el de la banda, ¿cómo convivís con tantas caras a la vez?
RS: Tengo una batalla con la imagen que quiero dar, tengo doble personalidad, soy Diego en mi vida real y Raul es mi personaje, mi nombre artístico. Siento que Diego es un poco más aburrido, porque es el padre de familia, el que lleva los chicos a la escuela, el que paga los impuestos; en cambio Raúl es el que está arriba de los escenarios, con artistas, de gira, famosos, etc. A veces subo una foto con mi familia o mascotas y tengo un montón de visualizaciones y ahí me pregunto qué tipo de contenido estoy generando, si está dando buena repercusión. Si hago un video tocando la batería, le pongo filtro o me saco una foto con mi hijo más chico tomando un helado. Descubrí que para la gente sí es interesante ver mi día a día, mostrar mi lado humano. Por eso me gustaría que alguien me maneje las redes para saber equilibrar.
Dependiendo lo que hagan Los Caligaris, se refleja en mi Instagram personal. El que me sigue a mí me ve habitualmente, ya sabe lo que hago. Por ejemplo, si me pinta sacarme una foto en el inodoro, lo hago y listo, después repercute. Dentro de mi perfil, no me gusta mostrarme serio, me gusta divertirme y hacer divertir a la gente. Mi abuelo, mi papá, mi familia viene de un circo, por ende yo traigo esas raíces.
IN: ¿Cómo te llevas con las marcas con las que trabajás?
RS: Todos me escriben al Instagram. Yo toco la batería y hasta antes de la pandemia me daban las baquetas en México, después de la pandemia no. Y me interesa entrar en ese rubro, que me den una batería por ejemplo, por lo cual me sirven las redes para que me conozcan, vean mis seguidores y poder pedirles. A mí me encanta la marca DW (baterías de EEUU) y estaría dispuesto hasta tatuarme el logo con tal de que me regalen una.
Hay veces que si es un emprendimiento chico o gente que conozco, lo hago de onda, le digo que me mande algún producto y le subo algunas historias o voy a un lugar y le hago contenido. Siempre charlo con la marca para ver qué necesita y si me sirve, veo cómo lo puedo ayudar.
IN: ¿Tu público fue cambiando con el tiempo?
RS: Sí, mucha gente se va sumando. Como siempre con Los Caligaris fuimos muy inquietos, nos fuimos acomodando a los estilos que se iban dando. Entonces eso hace que la gente te conozca en determinados momentos y que haya público distinto constantemente. Nunca hay una lógica o por lo menos lo veo así. Nos sigue tanto gente de edad chica porque hicimos un show con Piñón Fijo, hasta gente grande que nos conoce desde que arrancamos.