Para poder hacer frente a sus consumos corrientes para llegar a fin de mes, especialmente tras la devaluación, cada vez más argentinos apelan a sus tarjetas de crédito. Pero muchos ya las tenían “abarrotadas” con compras de durables de meses anteriores y todo se hizo una “bola” que ya no se puede parar. La suba de la morosidad en la cartera de las entidades crediticias ya es un hecho.
“En el tercer trimestre se está empezando a ver una suba de la morosidad. En algunos bancos el salto es muy grande y del rango “ideal” (1,5% / 1,9 %) se pasó al 3,3% en los privados y hasta el 5% en los públicos”, dice Melo. Y agrega: “incluso algunos tienen hasta 10%”
Dos cuestiones se diferencian de otros momentos de crisis: mucha gente entra en la categoría “morosos” por primera vez y una misma persona le debe varias empresas.
“La clase media es la más afectada. Un caso al que estamos acostumbrados en el estudio es el trabajador de una automotriz que estaba acostumbrado a determinado nivel de gastos y que de repente se vio afectado por suspensiones y quita de horas extras. Hoy algunos tienen casi dos tercios de sus ingresos comprometidos”, cuenta.
Todo impacta en la actividad económica
¿Hay una desaceleración de la demanda de créditos?, preguntamos
“Hay un aumento del nivel en el scoring de las empresas, por un lado, y, por el otro, los consumidores van a evitar créditos salvo cuestiones de extrema necesidad”, señala la abogada que con carteras de créditos con problemas de morosidad y que este jueves presentará parte de estos datos en el 3er. en el Hotel City Center, en Rosario (Santa Fe).
La parte amarga del boom del consumo: bancos duplican mora, clase media la más afectada
En el tercer trimestre del año los argentinos que entraron en la categoría “morosos” se multiplicaron y del porcentaje “ideal” de no más del 2%, los bancos públicos pasaron al 5% y los privados al 3,3%. “A principio del año el foco de las empresas estaba puesto en la gerencia comercial, hoy está en la gestión por mora”, explica Paula A. Melo, responsable Zona Centro de Ostengo Abogados, especialista en cobranzas. La principal afectada, asegura, es la clase media, a la que se le “ardieron” las tarjetas.