Las estadísticas abruman: 63% de la población argentina tiene sobrepeso y obesidad y el desarrollo de las cifras sigue en ascenso. Cuando no alcanzan las dietas y los tratamientos tradicionales fracasan, la siguiente barrera que propone la medicina (antes de una operación, por ejemplo) es la farmacología.
"Que llegue un nuevo fármaco ayuda -incluso- a que se vea la obesidad como una enfermedad y se la saque del terreno de la voluntad", analiza Katz ante el anuncio de Laboratorios Raffo de la comercialización en Argentina de Naltreva, el medicamento más vendido en EE.UU. para tratar el sobrepeso y la obesidad.
"Tenemos grandes expectativas y prevemos buenas ventas porque Naltreva va a ayudar a satisfacer una necesidad que existe en el mercado -explican desde la empresa-; el público potencial se estima en el 25% de la población argentina".
Aunque sobrepeso y obesidad son condiciones médicas distintas, Naltreva aplica para los casos de sobrepeso con índice de masa corporal (IMC) superior a 27 y alguna enfermedad asociada como hipertensión, diabetes o hígado graso. Para los casos de obesos (IMC mayor a 30), el fármaco aplica en forma general, en ambos casos con prescripción médica y venta en farmacias bajo receta archivada.
(Como referencia: una de 1,74 m. y 82 kg. de peso tiene un IMC de 27, al igual que otra de 1,60 m y 60 kg. Podés calcular tu IMC aquí).
Un tratamiento típico con Naltreva (a razón de 4 comprimidos diarios en dos tomas por día) vale $ 6.500. "Naltreva todavía no está en el PMO (Programa Médico Obligatorio) y -de hecho- el PMO no incorpora nuevas moléculas hace mucho tiempo -explican desde el laboratorio-; estamos trabajando en su incorporación porque sería muy importante para la población argentina que el Ministerio lo considere. Incluso estamos gestionando la incorporación en obras sociales: varias ya lo aprobaron y el resto está en trámite". Osde, por ejemplo, aún no tiene cobertura de Naltreva.
-¿Qué hace de este medicamente una novedad? -preguntamos.
-La combinación de Bupropión-Naltrexona permiten al paciente manejar mejor la saciedad y las porciones de alimentos y -paralelamente- ayudando a regular el placer que determina comportamientos compulsivos en la alimentación. Pero no hay magia: ningún tratamiento funciona si no se combina con mayor actividad física, una alimentación equilibrada y una buena gestión del estrés.
Pero aunque la gran mayoría de los obesos saben de memoria que deben comer menos y con mayor equilibrio y moverse más, la mayoría de los tratamientos y dietas fracasan a largo plazo y en ese sendero llega Naltreva, ayudando con la saciedad y los mecanismo cerebrales de recompensa ante la comida.
¿Es un psicofármaco? Sí, pero no tiene nada que ver con las anfetaminas que se recetaban (y aún se recetan) y no actúa sobre la dopamina ni la serotonina del cerebro.
Obviamente Naltreva está aprobado por el Anmat (además de la FDA de EE.UU.) y actúa en dos importantes áreas del cerebro: el hipotálamo (centro del apetito) y el área mesolímbica (regulador del placer y sistema de recompensa) y -de esa forma permite- reducir el hambre y controlar el apetito.