El tiempo les fue dando la razón y aislando a los escépticos que veían en los bancos de células madre sólo un negocio: hoy son 80 las patologías cuyos tratamiento es sensiblemente mejor con células madre extraídas al nacer y más de 30.000 las personas en Argentina contrataron este servicio.
Las posibilidades de contraer una enfermedad cuya tratamiento se optimiza con células madre de la sangre del cordón umbilical pasaron de 1 en 100 en 2007 a 1 en 10 en 2013.
“En países desarrollados ya no se discute si hay que guardar la sangre del cordón umbilical: se guarda y los padres sólo deciden si es en un banco privado -con costo- o en un banco público”, explican desde Protectia.
Pero además de avanzar en la concientización de la importancia de su servicio, desde este banco de células cordobés alistan todo para sumar un nuevo y potente servicio: preservar también -en el momento del parto- tejidos del cordón umbilical (además de la sangre), donde se encuentra otro tipo de células madre, aplicables potencialmente en otros tratamientos.
Si el equipamiento importado llega en los tiempos previstos, antes de fin de año podrían estar sumando este nuevo servicio, convirtiéndose Protectia en el primer banco de células madre del país en desarrollar esta tecnología.
Hoy por hoy, la contratación del servicio parte de un valor inicial de $ 12.400 (más IVA), que incluye el kit de recolección y toda la puesta en marcha del sistema de tratamiento de la sangre obtenida en el cordón umbilical. Esas muestras son tratadas de forma especial y luego criopreservadas, con un costo adicional (a partir del segundo año) de US$ 140 anuales.
En Argentina operan 7 bancos privados de células madre (el principal y pionero fue Matercell) y un banco público en el Hospital Garraham de Buenos Aires. Entre todos rondan los 30.000 “depósitos” y se estima un ritmo de crecimiento en torno al 20 y 25% anual.
Protectia es el único banco que tiene en Córdoba su “casa central”, con el equipamiento de crioconservación en esta ciudad (en Luis de Tejeda, Cerro de las Rosas) y trabajan para la compañía 22 personas (tiene, además, una filial en Mendoza y representantes en varios puntos del país).
Batalla legal superada
Los bancos de células madres privados de Argentina festejaron hace poco un fallo judicial que dejó en firme que las muestras tomadas son privadas de las personas (o sus tutores) y no pueden ser usadas por terceros sin consentimiento de sus titulares, como había pretendido en un momento el Incucai.