A priori, todo parece indicar un escenario tranquilo para la semana que viene. Según comenta John Walker -vicepresidente de la financiera Dracma S.A.-, “la mayoría de las encuestas marcan un empate técnico entre las principales fuerzas políticas. Eso no debería generar ningún tipo de cambio abrupto, ni en la demanda de dólares, ni en la situación de la bolsa”.
Coincide con esta postura Carlos Escalera, socio y corredor de Escalera Bursátil, quien hace especial énfasis en las proyecciones para la moneda norteamericana: “Si hablamos del dólar oficial, que es al que acceden principalmente los importadores, no debería haber ningún tipo de sobresalto. El Gobierno va a seguir haciendo todo lo posible para que mantenga su valor, y el Banco Central está en condiciones de sostenerlo, por lo menos hasta los comicios de noviembre”.
Ambos remarcan que, lo esperable, sería que desde el Ejecutivo mantengan una devaluación gradual del peso en los próximos meses, que acompañe a la inflación.
Por otro lado, sobre el “Blue”, Escalera advierte que algunos actores ya lo buscan para “cubrirse” de manera anticipada (lo que causó la suba de $ 3 pesos durante la última semana). Sin embargo, el especialista subraya que es lo lógico frente a un contexto electoral en Argentina.
Paralelamente, Walker vaticina una recuperación -aunque parcial y paulatina-, de los activos argentinos. En ese sentido, explica: “Algunas acciones valen actualmente un 20% de lo que cotizaban tres años atrás, tienen valores ínfimos y están muy castigadas. En el último mes ya empezaron a repuntar; lo lógico sería que sigan en ese camino”.
A su vez, los dos señalan que es importante recordar que se trata de una elección de medio término (y que estas todavía son las PASO), lo que le quitaría cierto peso.
¿Qué pasa si hay “goleada” de la oposición?
Para Escalera, el rally que tuvieron las empresas nacionales a lo largo de los últimos 20 días implica una anticipación del mercado a este posible escenario. Pero dice que no cabría esperar una profundización de esta tendencia si Juntos por el Cambio obtuviera una diferencia favorable considerable.
“Muchos hablan de que se repita algo como lo que pasó en 2013, pero no creo que se pueda hacer una comparación tan lineal. En ese año la derrota de Cristina Kirchner en provincia de Buenos Aires fue una señal muy fuerte, y no parece que se vaya a repetir algo así. Además, si bien es cierto que al mercado pareciera ‘gustarle’ más el modelo de la oposición, muchos inversionistas ya se quemaron por apostar a eso, por lo que no creo que vuelva a darse con esa magnitud” completa de corredor.
¿Y si el oficialismo retiene las mayorías?
Según Escalera, la victoria del Frente de Todos podría desestabilizar la calma, pero aclara que “sería necesario un resultado realmente sorprendente; algo que sea verdaderamente aplastante”.
El experto detalla que, en el caso de que el oficialismo perdiera por una diferencia pequeña, podría esperarse algo parecido a un “plan de salvataje” que “ponga plata en la calle”. Eso podría conducir a una subida sostenida del dólar paralelo durante los meses previos a las mesas de noviembre, aunque no llevaría a un salto repentino.
Las declaraciones de Guzmán (y el “fantasma” de 2019)
Durante una entrevista para el canal A24, el ministro de economía argentino Martín Guzmán declaró que "las condiciones son robustas para mantener la política cambiaria" y que "no se está planteando ningún cambio de rumbo, porque el que se tomó está funcionando".
Además, dijo que el año pasado "las brechas llegaron a ser 130% y 150%; se redujeron entre 60 y 70 puntos porcentuales; la economía está yendo en la dirección correcta", aunque admitió que en los días previos a las elecciones pueden registrarse "ciertos ruidos".
Cabe recordar que en agosto de 2019 -cuando se celebraron las últimas PASO-, la inesperada victoria del Frente de Todos por más de 15 puntos, llevaron a que algunas acciones cayeron más del 50% y los bonos cerca del 15%. Por su parte, el dólar pegó un salto del 24%.