Desde su fábrica ubicada en el barrio porteño de Santa Rita, Tomasso elabora cerca de 400.000 pizzas y más de un millón y medio de empanadas todos los meses. Con esos productos abastece a su red de más de 60 franquicias, ubicadas en Ciudad Autónoma, localidades de Provincia de Buenos Aires, Rosario (Santa Fe) y hasta dos capitales extranjeras: Asunción (Paraguay) y Montevideo (Uruguay).
Tras una postergación -producto del contexto sanitario y la crisis generada por la pandemia-, la marca se prepara para afrontar un nuevo desafío: su expansión hacia el interior de la Argentina.
Una de las plazas que esperan conquistar en 2022 es justamente Córdoba. La firma inaugurará su primer local en Fructuosa Rivera al 14, en el barrio de Nueva Córdoba.
“Córdoba, como las otras capitales del país en las que estamos, son el primer paso en la carrera de la expansión hacia el interior de Argentina. También vemos que es una ciudad que se caracteriza por recibir mucho público joven y el perfil de Tomasso es muy asimilable al del estudiante”, explica Diego Parra, gerente de Marca de Tomasso.
El punto de venta abrirá durante los primeros días de febrero, y desembarca mediante una alianza entre los socios de la firma y un operador local; “un poco el espíritu es ir a las zonas nuevas con riesgo propio”, comenta el vocero.
“Creemos que en Córdoba podemos llegar a tener fácilmente 5 locales; no tenemos un plazo para este objetivo, pero sí esperamos sumar un total de 3 puntos de venta antes del fin de este año. También estamos interesados en Carlos Paz y otras ciudades de la provincia; pero por ahora, la idea es hacernos conocer en la capital y después hacer el efecto 'cascada”, remarca Parra.
Precios competitivos y venta de cercanía: las claves del modelo
Según cuentan desde Tomasso, sus locales se distinguen por su formato “take away”; son espacios relativamente chicos (cerca de 60 m2) y no cuentan con servicio para comer allí.
Los franquiciados reciben el producto de fábrica y se encargan de su terminación. En el caso de las empanadas, solo deben hornearlas, mientras que para las pizzas se envía la masa pre cocida y los toppings y salsas por separado, por lo que deben integrar los elementos. “Esto último garantiza un estándar de calidad bastante alto” afirma Parra.
Y agrega: “Un diferencial de nuestra marca es nuestra pizza; mientras muchos competidores trabajan únicamente la empanada, nosotros nos animamos a meternos en este otro segmento que sabemos que tiene sus desafíos en producción y operativa. Pero preferimos lidiar con eso y tener una escalada de facturación más grande”.
Parra explica que los elementos recién mencionados permiten una fuerte relación precio-calidad, que es el gran distintivo de la Tomasso. Sus pizzas oscilan entre los $ 800 y $ 1.000, dependiendo de la variedad.
El gerente también cuenta que no le otorgan gran importancia al servicio de entrega: “Trabajamos con delivery pero únicamente a través de plataformas; este canal de venta representa apenas el 20%. Tomasso nació sin delivery, porque es un producto de cercanía: siempre decimos que su incidencia está en las 5 cuadras que tiene a la redonda”.
“El concepto es 'te dejo el producto listo al mejor precio posible, y parte de lo que tenés que hacer vos es ir a buscarlo'. La dinámica de consumo y la posibilidad de ir a un precio sumamente competitivo hace que el cliente haya quebrado esa barrera y que no sea un problema ir a buscarlo”, remarca.
-¿Cuánto cuesta poner una franquicia? -preguntamos.
-Todos nuestros locales se establecen a través de franquicias. Actualmente poner uno de nuestros establecimientos ronda los $ 5 millones. Siempre aclaramos que ese precio contempla el costo total de la inversión, no solo lo que cobramos desde la marca: contemplamos todos los costos -comenta Parra.